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Altos costos de almacenamiento son causados por las demoras del Invima

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Carlos Rodríguez Salcedo

¿Qué tan fuerte es la industria farmacéutica nacional?
En el ranking de los primeros 20 laboratorios farmacéuticos presentes en el mercado colombiano, 16 son multinacionales, de un total aproximado de 440 laboratorios que participan. Del top cinco de los laboratorios productores de genéricos, dos han sido comprados por multinacionales.

El 70% de las unidades de los medicamentos del Plan Obligatorio de Salud (POS), que utiliza el sistema, los da la industria nacional. ¿Qué pasaría con los precios de los genéricos, que solo le cuestan al sistema 20% de lo que invierte en compra de medicamentos, si los principales laboratorios de genéricos pasan a ser de multinacionales?

¿La industria local tiene las condiciones para competir con las multinacionales?
No las suficientes. A la industria se le exige altas inversiones en tecnología y conocimiento para responder por estándares de calidad. Es un sector de alta barrera tecnológica, con altos costos de materias primas, maquinaria y equipos que no se producen acá.

Además, nos corresponde asumir el IVA de materiales, como un mayor costo del medicamento, que no impacta al que se produce en el exterior. También, pagar estudios de biodisponibilidad en la población colombiana, que no se exigen a las multinacionales, que traen los estudios desde sus países.

¿Cómo participan en el suministro al sistema de salud?
Somos grandes proveedores y nuestros clientes nos consideran como los mejores en servicio. 50% de nuestra facturación es a instituciones tales como EPS y sus operadores. La crisis financiera del sistema de salud nos afecta enormemente. Es una consideración que debe hacer el Estado con la industria nacional, que es la que le suple 70% de los medicamentos del POS.

¿Qué otras consideraciones debe hacer el Estado?
Una de las más importantes es el IVA. Solo se exime de este impuesto algunos de los principios activos. El registro sanitario debería ser suficiente para que los proveedores de empaques, envases, maquinaria y equipo, y otras materias primas, pudieran exonerar a la industria de este impuesto.

Otro tema es que el Invima, que es el ente regulador por excelencia, contribuya trabajando más como facilitador y orientador de nuestros equipos. Podría otorgar ágilmente los registros sanitarios y sus renovaciones, y cumplir con los términos establecidos por ley, con las certificaciones exigidas para los trámites de las importaciones, pues sus demoras causan altos costos de almacenamiento.

¿Cuál es el impacto de un trabajo como este, con medicamentos controlados?
El Fondo Nacional de Estupefacientes controla los cupos para la producción de este tipo de medicamentos, los cuales son derivados en muchos casos del opio.

Su consumo indiscriminado afecta a los jóvenes, quienes buscan estos medicamentos por adicción. La responsabilidad empieza con una buena información y con la capacitación desde la misma venta y la dispensación del medicamento. 

Se pasó de 5% a 70% de participación

La industria farmacéutica del país pasó de tener 5% de participación en el mercado, en los años 90, a proveer 70% de las unidades que se consumen. Sin embargo, Jiménez aseguró que “80% del gasto del sistema se paga en medicamentos de alto costo que son en su mayoría proporcionados por las multinacionales”. En el caso de Laproff, la directora resaltó que son el único laboratorio que produce el medicamento carbamazepina, un antiepiléptico que suministrarán en el país.

La opinión

Alberto Bravo
Presidente de la Asociación de Industrias Farmacéuticas

“La Ventana Única de Comercio Exterior del Invima era una obstrucción evidente. Ha mejorado muchísimo y hoy no tenemos quejas por parte de los afiliados”.