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Argos culminó unificación en República Dominicana

Tatiana Arango M.

República Dominicana se convirtió en el tercer país en el que la colombiana Cementos Argos, la quinta cementera más grande de Latinoamérica y el tercer productor de concreto más grande de Estados Unidos, está presente de forma plena.

Así lo explicó la empresa en un comunicado, en el que señaló que la productora y comercializadora de cemento y concreto completó su incursión a República Dominicana y, desde ayer, opera plenamente en el país caribeño, tras siete años de su llegada a ese mercado, al que entró gracias a la compra de una participación en Cementos Colón, una de las principales empresas cementeras del país. En 2009, Argos pasó a controlar esta compañía y comenzó un proceso de integración para alinear las operaciones y garantizar que el mismo servicio que ofrece en Colombia se de a los clientes dominicanos.

De acuerdo con Mauricio Ossa, vicepresidente de la Regional Caribe de Argos, la unificación realizada por la compañía “es más que un cambio de nombre. Es el resultado de un intenso trabajo para asegurar la calidad en el producto y en el servicio que esperan las personas con las que trabajamos”.

Según datos de la firma, en el proceso de integración, aunque no se especificaron cifras, Argos ha realizado varias inversiones para aumentar la capacidad de producción de su planta y ya ha puesto en marcha una fábrica de concreto para incursionar en ese mercado.

Ossa agregó que “la presencia en República Dominicana forma parte de la conectividad logística que nos permite atender de manera eficiente a los mercados con los que trabajamos. Y, además, nos metemos de lleno a operar en un país con una competencia muy fuerte, tanto en cemento como en concreto”.

Actualmente, Argos tiene operaciones en Colombia, Estados Unidos, República Dominicana, Panamá, Haití y seis islas del Caribe. Así mismo, exporta a 35 países y cuenta con 11 plantas de cemento, seis moliendas de clínker, más de 2.000 mezcladoras y más de 300 plantas de concreto.

Durante los tres primeros meses del año, la compañía registró utilidades netas por $52.502 millones, con una baja del 79,5% respecto a igual período de 2012. Por su parte, los ingresos operacionales consolidados crecieron 3,7% en el primer trimestre. El Ebitda fue de $232.196 millones, 20% superior al del mismo lapso de tiempo de 2012. Sin embargo, las ventas en el país cayeron 8,2%.