Auxico Resources, la minera canadiense que busca explotar tierras raras en Vichada
jueves, 12 de junio de 2025
La compañía es la primera que obtiene permiso de la Agencia Nacional de Minería y de Corporinoquía para explorar estos minerales, pero aún no cuenta con licencia comercial
El 10 de abril China y Estados Unidos acordaron eliminar las restricciones de exportación de tierras raras, un aspecto relevante para llegar a una tregua comercial, dado que el país asiático es el primer productor con 240.000 toneladas métricas de óxidos de tierras raras en 2023, 70% del total global.
En Colombia, la única explotación de tierras raras a la fecha es ilegal, pues solo hay una compañía que ha iniciado los trámites para convertirse en titular minero de tierras raras, pero aunque ya ha logrado algunos permisos, no ha iniciado la explotación. Se trata de la canadiense Auxico Resources, que con la filial Auxico de Colombia S.A. tiene la intención de explotar tierras raras en Vichada y tener una refinería para las mismas en Santa Marta.
Hay 17 elementos de tierras raras, ETRs, que se encuentran en más de 250 minerales y su relevancia comercial se centra en sus múltiples usos como carros eléctricos, turbinas, celulares, catalizadores para refinación de petróleo, aditivos de cerámicos, pantallas electrónicas, etc.
Giovanni Franco Sepúlveda, profesor de la Facultad de Minas de la Universidad Nacional, y exviceministro de Minas, explicó que “en marzo de 2023, la Agencia Nacional de Minería, ANM, y el Servicio Geológico Colombiano identificaron las tierras raras como uno de los 28 minerales críticos del país. Y un estudio de la Universidad Nacional señala que los minerales como tierras raras son fundamentales para alcanzar la neutralidad de carbono para 2050”.
Con esta línea, la Asociación Colombiana de Minería, ACM, estimó que para cumplir el Plan Nacional de Desarrollo 2022 - 2026 se requiere 219 toneladas de tierras raras, pero a la fecha, el proyecto más adelantado, todavía no está produciendo.
En 2023, Auxico identificó 361 pozos con presencia de tierras raras en la propiedad Minastyc, en Puerto Carreño, Vichada, pero en febrero de este año, presentó un nuevo informe en el que indica que el muestreo exploratorio previo no cumplió con los estándares exigidos para el cálculo de recursos, por lo que la presencia de estaño, tantalio, vanadio y tierras raras en los pozos, no pueden clasificarse como reservas o recursos, por lo que iniciaron un programa de muestreo a granel con un tamaño de muestra mínimo de 2,5 toneladas en al menos 30 pozos.
En cuánto al proceso normativo, en 2023 obtuvieron permisos de la ANM y Corporinoquía, pero de acuerdo con la investigación de Climate Tracker, se encontraron complicaciones para tener la concesión minera y la licencia de comercio.
En primer lugar, la propiedad y los permisos no están a nombre de Auxico, quien registra es la persona natural Clímaco Silvestre Unda Barrios, aunque Harold Barbosa, vicepresidente de Auxico para Latinoamérica, aparece en copia de los documentos, y la compañía manifestó que le compró los derechos de posesión de la tierra durante 60 años por $750 millones a Unda.
Al consultar el visor de Geocortex en la plataforma de gestión AnnA Minería, en el titulo minero LFH-14431X el titular es Unda y el operador Minero Autorizado es Juan Guillermo Garcia.
Angel Yezid Naranjo Castillo, líder del Proyecto Minastyc, explicó que Jorge Diaz, un funcionario sin representación registrada en Colombia de Auxico, quien posteriormente sale de la compañía por malos manejos, indujo al fraude, "toda vez que el titular le informo sobre la venta anterior de los derechos mineros por 75% a terceros".
Además del aspecto legal de las tierras, Naranjo Castillo también comentó que hay investigaciones en curso en la Fiscalía (con el proceso 990016000646202410066) por denuncias de delitos de lesa humanidad por amenazas contra la vida del titular minero y sus socios de parte de la compañía, y han pedido medidas de protección por "amenazas contra la vida y la propiedad, ante las autoridades colombianas, y presentaron una denuncia ante la Comisión Internacional de Derechos humanos para solicitar medidas cautelares por las mismas.
Otro aspecto es que las comunidades de los resguardos indígenas Guacamayas Maipore, Guaripa, Bachaco y La Hormiga están divididas por el impacto social y ambiental que podría generar el proyecto ubicado en límites de la reserva de la biósfera el Tuparro y la reserva Bojonawi; y no hay confianza en las ganancias y volúmenes estimados por la compañía, la cual prevé US$300 millones con una producción de 300 toneladas al mes. Mientras que la comunidad extrae máximo 700 kilos de manera manual al mes.
“Se estima que el proyecto podría extraer hasta un millón de toneladas métricas durante un periodo de 17 años. El futuro de las tierras raras es prometedor pero complejo, se requiere compromiso para garantizar que su explotación se realice de manera responsable y sostenible”, dijo Franco.
Adicional al proyecto en Vichada, Auxico también anunció que planea construir una refinería de tierras raras en Santa Marta, de 10.000 metros cuadrados para procesar 36.000 toneladas al año. Firmó un contrato de arrendamiento en la Zona Franca Tayrona, pero sin la extracción, la refinación todavía, tampoco, es una realidad.