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El Once Caldas logró reorganizar sus deudas y evitará su liquidación

Vanessa Pérez Díaz

El equipo de fútbol Once Caldas necesitó dos años para poner “la casa en orden” desde el punto de vista financiero y así evitar su liquidación como sociedad deportiva.

Ayer en la mañana, tras una audiencia realizada en las instalaciones de Bogotá de la Superintendencia de Sociedades, se logró reajustar un cronograma final de pagos de las deudas que tenía acumuladas el onceno manizalita.

Pablo Muñoz Gómez, promotor del proceso de reorganización del Once Caldas (que inició en agosto de 2012), explicó a LR que la fase de reorganización se cerró con éxito al lograr negociar la mayor deuda que tenía el equipo de fútbol. “Cerca de 75% de las acreencias (deudas) que tenía esta sociedad deportiva era con la Dian, lo que representa el grueso del dinero que Once Caldas debe. La Dian negoció con el equipo de fútbol y le dio oportunidad para pagar aproximadamente $10.500 millones, redondeando la cifra, en 25 años”, indicó Muñoz Gómez.

El abogado agregó que el pago del resto de deudas quedó nuevamente programado de la siguiente manera: $700 millones, que se le deben a los empleados, se pagarán en 10 meses; cerca de $500 millones a cancelar a pequeños acreedores y proveedores de Manizales, se pagarán en 11 meses; otros $4.000 millones, por concepto de retención a la fuente, se pagaron la semana pasada; y queda pendiente un último monto a los fondos de pensiones Skandia, Protección y Colfondos, para lo cual se aprobó un plazo de 30 días para pagar a partir de la audiencia de ayer.

“Estas cantidades resumen aproximadamente el total de deudas que tenía el Once Caldas. Con la aprobación, entre las partes afectadas, de un cronograma final de pago, podemos decir que este equipo de fútbol puede volver a funcionar sin problema alguno y así se evita el inicio un proceso de liquidación. Ya tiene las puertas abiertas para que lleguen nuevos patrocinadores”, dijo el promotor.

El Once Caldas, que dos meses después de entrar en reorganización fue adquirido por la empresa Kenworth de la Montaña, fue el cuarto equipo de fútbol colombiano que se sometió a la reorganización o reestructuración debido a la crisis financiera. Antes de que lo hiciera esta sociedad, la lista la integraban el Cúcuta Deportivo, Corpereira y América de Cali.

En ese momento, las cifras que presentaba la sociedad deportiva de Manizales (a mayo de 2012) era $23.440 millones en pasivos, representados por impuestos, cuentas por pagar a corto plazo, obligaciones financieras a largo plazo, pasivos a corto plazo, obligaciones laborales, entre otros.

Así mismo, el patrimonio era negativo ($6.642 millones) y el endeudamiento llegaba a 139,54%; mientras que las obligaciones vencidas con más de 90 días, según los reportes del Once Caldas entregados a la Supersociedades, era superior a $2.340 millones. Los resultados de los equipos de fútbol al cierre de 2013 aún se desconocen porque están en proceso de entrega a la Supersociedades.