“El próximo año vamos a tener cerveza artesanal a base de quinua”
martes, 12 de septiembre de 2017
La cadena de helados de nitrógeno también estudia la posibilidad de ingresar en segmento de restaurantes, gimnasios y tés.
Lina María Guevara Benavides
Crema entre la niebla, eso significa Misty Cream, el nombre de la primera cadena de helados nitrogenados, una empresa que nació en 2015 cuando sus fundadores, Ricardo Arbouin y María José Pradilla, decidieron competir en el segmento de artesanales.
Dos años después de su creación, cuando la compañía factura $400 millones al cierre del primer semestre, Arbouin habló con LR sobre la incursión en franquicias y las nuevas líneas de negocio.
¿Qué es Misty Cream?
Es una empresa que fundamos en 2015. Empezamos a trabajar con heladería artesanal y buscábamos mantener esos atributos en el tiempo, entonces, encontramos en el nitrógeno líquido un elemento natural para hacerlo y darle otros beneficios como la experiencia de compra y la posibilidad de tener un helado con mezclas de frutas naturales más fresco, porque no se somete a un proceso de congelación muy largo y más cremoso porque no se forman cristales de hielo.
¿Descubrieron el nitrógeno por casualidad?
El problema con el helado artesanal es que si no se congela, como no tiene conservantes ni aditivos, si no se vende hay que desecharlo. Vimos que en California estaban haciendo helados con nitrógeno y fuimos a conocer el tema. Yo había tenido relación con el nitrógeno líquido porque es un elemento que se usa mucho en la ganadería, así que aprovechamos que yo conocía los proveedores y sabía manejarlo. El nitrógeno es súper volátil entonces cuando sale, toca la mezcla, se vuelve niebla y pasa de líquido a gaseoso, por eso Misty Cream, que es crema entre la niebla.
¿Cuántos puntos tienen?
Empezamos con carros y desarrollamos válvulas para transportar el nitrógeno. Comprobamos que era rentable y hoy tenemos cinco carros propios y un punto fijo la 94. Este año empezamos con franquicias y ya tenemos ocho: tres en Bogotá y las demás en Sogamoso, Bucaramanga, Cartagena, Ibagué y Medellín.
Y, ¿con cuántas van a cerrar?
La idea es terminar el año con un poco más de 30. Este año vamos a cerrar en Cali, Valledupar, Barranquilla, Montería, Pereira, Armenia y Manizales. También tenemos interesados en Ecuador, Panamá, Costa Rica, Guatemala y España.
¿A cuáles llegarían primero?
Tenemos un contrato de respaldo con Marca País de ProColombia y nos están apoyando en ruedas de negocios internacionales. Creemos que este año alcanzamos a cerrar Ecuador y Costa Rica.
¿Qué otros planes tienen?
Hay una cerveza artesanal de quinua, que es una industria muy novedosa y la están produciendo en Suesca. Es un desarrollo para 2018 y apenas este lista la vamos a tener; también queremos incursionar en tés nitrogenados en lata y estamos trabajando en un proyecto para desarrollar máquinas y entrar a restaurantes. La otra idea es apuntar a gimnasios con helados o batidos de proteína, lo estamos trabajando y estará en el cuatro trimestre.