Empresarios del sector automotor tienen pesimismo pese a las buenas ventas de carros

El reporte de las ventas de vehículos nuevos y usados en el país viene marcando cifras positivas, pese a las condiciones actuales que presionan el mercado a nivel mundial. Según cifras de Andemos, para septiembre se vendieron 25.893 automóviles nuevos, representando un crecimiento de 4,6% frente al mismo mes del año anterior. Además, según el último reporte de la alianza Andi- Fenalco, en el año se han vendido 195.256 carros nuevos, lo que representa un incremento de 9,7% frente a 2021.

En cuanto a autos usados, en septiembre se traspasaron 101.498 automóviles, para un total este año de 834.099.

Entre las marcas con más ventas se encuentran Renault con 36.858 vehículos vendidos; seguido de Chevrolet, con 31.200 vehículos; Toyota, 18.914; Suzuki, 15.287 y finalmente, dentro del top cinco, quedó Kia con 14.498 automóviles.

A su vez, frente a los vehículos usados las marcas más representativas son Chevrolet, con 242.218 referencias vendidas; seguido de Renault, 132.615 vehículos; Mazda, 68.987 unidades; Kia, 54.527, y terminando el top cinco se encuentra Toyota, con 44.325 automóviles.

Todas estas cifras positivas se concretan bajo un contexto desafiante para el sector, debido a las condiciones macroeconómicas, las altas tasas de interés, una inflación disparada, el alza del dólar y la crisis de suministro. Y esto ya se refleja en la percepción de los empresarios.

“El impacto del alza del dólar sin duda es un factor complejo para toda la industria. El desarrollo de los vehículos necesita contar con los componentes y autopartes que se fabrican alrededor del mundo y al presentarse un aumento de esta divisa, repercute directamente en su operación”, argumenta Ariel Montenegro, presidente y director general de Renault - Sofasa.

Así lo evidencia la última encuesta de Andemos que reporta el clima del sector automotor que, aunque mantiene percepción positiva, muestra proyecciones a largo plazo tienden a ser más restrictivas por la incertidumbre.

En opinión de los empresarios, 59% de los empleados piensan que dentro de un año las condiciones económicas del país estarán peores, 25% tienen pensado que todo seguirá igual y solo 11% tiene esperanza en que las condiciones sean mejores.

A pesar de esto, 79% de los empresarios dice que a su negocio le ha ido mucho mejor frente al año anterior, y solamente 21% expresa que esto sería mucho peor; para junio de este mismo año, 83% dijo que a su negocio le estaba yendo mejor.

Las empresas coinciden en describir este como un buen momento. La encuesta arrojó que 84% de los empresarios opinó que la situación es buena, 16% piensa que es aceptable y no hubo nadie, 0%, que afirmara que es mala.

Esto es diferente a la hora de hablar de proyecciones a futuro, ya que 45% de los empresarios cree que específicamente a su negocio, dentro de un año, le estará yendo peor; 31% cree que les puede ir igual, mientras que 24% tiene la esperanza de que les vaya mejor.

“Para mitigar estos efectos tenemos varias estrategias, una desde el punto de vista netamente financiero: hacemos compra de forwards en el mercado financiero. Y, por otro lado, también tratamos de asegurar ciertos inventarios con la mayor anterioridad posible, esto con el fin de que no se vean tan expuestos a una devaluación fuerte como la que estamos viviendo actualmente”, asevera Juan Carlos López, gerente de mercadeo de Dinissan frente al escenario de presiones globales.

Esto también se ve reflejado por la crisis a nivel de suministros que experimenta el mundo. Esta hipótesis ya fue comprobada y LR descubrió que los carros con mayor demora en este año son las camionetas Volskwagen, T-Cross, Nivus y Tao, las cuales pueden demorarse entre dos y cuatro meses.

En otra empresas como Nissan, se pueden presentar demora de un mes en algunas de las referencia de sus vehículos, como Nissan Sentra, Nissan Kicks, Nissan Qashqai, Nissan Murano y la Nissan Frontier Pro - 4X Gasolina.

Mientras que el concesionario Novamotors, distribuidor oficial de la empresa japonesa Toyota, ha presentado demoras de ocho a 14 meses en sus referencias básicas e híbridas, respectivamente. En cuanto a los automóviles Corolla, pueden tardar cerca de ocho meses, y en su camioneta Toyota Rav 4 Hybrid pueden presentar demoras cercanas a los 14 meses.

El concesionario Casa Toro, por su parte, reportó demoras en su referencia de Mazda CX30 de entre tres y seis meses para los compradores. Y, finalmente, el concesionario Motovalle reportó demoras de las referencias Ford Escape Titanium, así como en su camioneta de platón Ford F-150, de aproximadamente uno a dos meses.

Esto se refleja también en los datos de la encuesta, puesto que ningún empresario, 0%, dice que los inventarios actuales de vehículos nuevos para venta son altos; 34% opina que estos son normales, y 66% piensa que los inventarios se encuentran en cifras rojas, con baja disponibilidad. Los vehículos usados, por su parte, reportan cifras de 0% inventarios altos, 10% normales y 90% reportan inventarios bajos.

Por parte de los concesionarios el ecosistema es mejor, aunque los registros altos de autos nuevos sean de 0%, 41% permanecen normales y 59% se consideran bajos. Frente a los automóviles usados, 6% de los empresarios opinaron que el inventario era alto, 52% normales y finalmente, 42% que eran bajos. Es por esto que 64% de los empresarios del sector automotor cree que no es una buena idea invertir en este momento, y solo 36% de estos cree que es un buen momento para invertir.