Las empresas tipo BIC podrían generar mayor cantidad de empleos y de mejor calidad

La urgencia de adoptar nuevas prácticas alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y también por atender una nueva era de consumidores, impulsó al país en el desarrollo de un nuevo ecosistema empresarial que superara el modelo tradicional de responsabilidad social, hacia el de triple impacto. Esto se traduce en la apuesta por compañías que no solo generen valor económico, sino social y ambiental.

Sobre este tema se habló en el evento ExpoBic 2022, que reunió a varias de las entidades promotoras de las buenas prácticas en el tejido empresarial, y a compañías que son copartidarias con estos objetivos, al estar certificadas con uno de los modelos de triple impacto: Beneficio de Interés Colectivo (BIC).

Con el objetivo de ahondar entorno a qué es ser una Empresa BIC y cuál es la gestión que vienen realizando las compañías certificadas, el evento contó con el panel: “El valor de ser BIC”.
En el espacio hicieron presencia empresarios como Carlos Cavelier, coordinador de Sueños de Alquería S.A.S BIC; María Fernanda Yepes Gómez, CEO de Felicidad Colectiva S.A.S. BIC; Sebastián Zapata, CEO de Elepha S.A.S BIC; Carolina Osorio Florian, CEO de Cimbra & M S.A.S BIC; y, Wendy Dallana Olaya Hurtado, vicepresidente de Frutichar SAS BIC. También hizo presencia el embajador de la Unión Europea, Gilles Bertrand.

Los participantes del panel coincidieron en que estar certificados como una Empresa BIC, es tener un valor agregado dentro del mercado. Para estos, lograr ese diferencial implica dejar de concebir menos a las empresas como simples generadoras de dinero, y más como potenciales agentes de cambio en las cadenas de valor.

En términos generales, una empresa de triple impacto es aquella en la que su modelo de negocio está pensando para producir beneficios en todas las etapas productivas. Hoy, por ejemplo, según el Ministerio de Comercio, hay más de 1.400 empresas certificadas con este sello ambiental y socialmente responsable. Lo anterior es debido a la Ley 1901 del 18 de junio de 2018, que permite que una compañía, de manera voluntaria, pueda certificarse como BIC. Con esto, las empresas se comprometen a reportar indicadores de gestión ambientales, sus colaboradores y comunidad.

Carlos Cavelier

Coordinador de Sueños Alquería

El representante de Alquería en el foro, dijo que la clave para lograr un impacto positivo es poner primero a los clientes internos y externos, antes que a los accionistas. Indicó que diseña proyectos sociales para sus 4.500 trabajadores.

María F. Yepes Gómez

CEO de Felicidad Colectiva

La empresaria dijo que “necesitamos rodearnos de muchos clientes y proveedores, que tengan una misma filosofía organizacional”. Esto con el fin de que el sector empresarial pueda construir estrategias responsables.

Wendy D. Olaya

Vicepresidente de Frutichar S.A.S.

La microempresa de producción de aceites vegetales cuenta actualmente con 80.000 hectáreas, las cuales, según Olaya, son trabajadas de manera agroecológica. La compañía emplea a indígenas y víctimas de la guerra.

Sebastián Zapata

CEO de Elepha S.A.S. BIC

El CEO informó que, desde Elepha, empresa que trabaja por la autonomía financiera de la mujer, crearon un sistema de distribución para que las mujeres puedan vender sus productos sin intermediarios.

Carolina Osorio

CEO de Cimbra & M S.A.S. BIC

La directiva que dirige la empresa del sector de la construcción, puntualizó que uno de los propósitos es formar a gente sin experiencia en temas de andamios, solo con el objetivo de crear más plazas de empleo.

Gilles Bertrand

Embajador de la Unión Europea en Colombia

El embajador explicó que la comunidad política se enfoca en impulsar el modelo BIC en Colombia, por ejemplo, siendo guías en la economía circular. Dijo que una empresa BIC genera mayor empleo y de mucha mejor calidad.