En marzo de este año estarán listos los primeros apartamentos de Ciudad Fabricato

Los planes de la empresa textilera Fabricato parecen marchar sin ningún contratiempo y en 2019 esperan que las ventas evidencien la recuperación que se espera de la economía. Así lo confirmó a LR Carlos Alberto de Jesús, presidente de la compañía.

El ejecutivo explicó, en la inauguración de la edición 31 de la feria Colombiatex, que las iniciativas “siguen muy apegadas a los planes que se habían definido inicialmente en cada una” y uno de los avances más destacados está en los desarrollos de ‘Ciudad Fabricato’; uno de sus principales proyectos a la fecha.

¿Cómo va la obra de Ciudad Fabricato?

Va muy bien. Las reuniones que hacemos mensualmente con los desarrolladores y promotores nos siguen diciendo que es todo un éxito. El plan sigue apegado a lo que se había definido. En 2021 se inaugura el centro comercial y ahora en marzo se entregan los primeros apartamentos.

En finca raíz aprovechando el lote en Bello se esperaban ventas por $1,3 billones, ¿se mantiene esa meta?

Fabricato tenía una parte espacial sobre ese valor de $1,3 billones. El número sigue siendo ese, más sí hubo una sobre valuación de los valores a fines del año pasado.

Actualmente, la empresa tiene un acuerdo por cobrar de $162.000 millones, a pesar de ya haber cobrado $10.000 millones el año pasado.

Hay que decir que sí fue un proyecto muy exitoso, ya que contribuyó para aliviar las finanzas de la compañía, cuya condición financiera mejoró mucho a comparación de hace cinco años, cuando el proyecto estaba en desarrollo.

¿Cómo va la ocupación del parque industrial?

Ya está hecho y en funcionamiento. Terminamos diciembre con 60% arrendado. Esperamos que en los próximos meses esté funcionando a tope, como lo tenemos pensado. Cuando estemos en esa condición de 100% de ocupación, el ingreso estimado solo por arrendamiento sigue siendo el mismo que teníamos planeado en agosto, que oscilaba entre $5.500 millones y $6.000 millones.

Hay otro porcentaje que vendrá por la venta de servicios como tratamiento de agua y vapor. Esto puede representar unos $1.500 millones o $2.000 millones adicionales, aunque todo depende del tipo de empresa que llegue y de la demanda por el tipo de servicio que ofrecemos.

¿Cómo van en materia de exportaciones y ventas?

Pensamos seguir creciendo y la meta está cerca a 27%. No obstante, puede estar sobre 30%. En ventas 2018 no fue tan satisfactorio porque hemos percibido una importación más alta de confección y un crecimiento en importación de ropa confeccionada. La venta de ropa creció cerca de 5%, pero hay una importación de ropa que ha crecido entre 30% y 40%. Si la venta de ropa crece, y eso estuviera equilibrado, debería jalar la industria de la confección, las telas, los hilos, y toda la cadena.

El año pasado ustedes cerraron negocios en Brasil para exportar, ¿cómo van estas ventas?

No empezamos con prendas, sino con exportación de telas. Hoy fabricamos telas y las exportaciones de prendas la hacemos de forma conjunta con los confeccionistas colombianos.

Mejoras en eficiencias para 2019

Frente a mejoras en eficiencia De Jesús comentó que “en 2018 hubo inversión, se desarmó una fábrica y se preparó la otra para recibir la capacidad instalada de la primera, y todo eso son gastos y costos. Esperamos que para este año podamos percibir las bondades de esas acciones en el punto de vista comercial al tener una fábrica más estructurada y más eficiente. Terminamos el tercer trimestre de 2018 con la capacidad instalada de la planta de Rionegro en la de Bello. Así, hoy hay una sola fábrica que puede llegar a cinco millones de metros de tela al mes”.