Manifestaciones en Guavio ponen en peligro 20% de la capacidad de la central

Debido a bloqueos y manifestaciones que persisten en el municipio de Ubalá, y las restricciones de movilidad a las que se han visto sometidos los contratistas de Enel, no se han podido realizar los debidos mantenimientos preventivos en la Central Hidroeléctrica El Guavio. Por esta razón, la compañía declaró indisponibles las unidades de generación uno y cinco de la central a partir de hoy.

Estas dos unidades aportan 500 megavatios (MW) de los 1.260 MW de la capacidad que está instalada en la central. Además de no poderse garantizar la operación con normalidad de estas unidades, para el 13 y 14 de septiembre dejarán de estar disponibles también las unidades 4 y 2, dejando afuera otros 500 MW. Esto significaría que la central hidroeléctrica más grande del país estaría operando al 20% de su capacidad total.

“El suspender la operación de sus unidades pone en riesgo inminente la seguridad y confiabilidad del Sistema Interconectado Nacional (SIN), y la prestación de un servicio público esencial para los hogares y las ciudades. Por lo anterior, hacemos un llamado urgente a las autoridades competentes para que garanticen la correcta operación de la Central y poder salvaguardar así la seguridad energética del país”, aseveró Eugenio Calderón, gerente de Enel Green Power & Thermal Generation de Colombia y Centroamérica.

Y es que Enel, por las manifestaciones, ha tenido que aplazar seis veces las jornadas de mantenimiento de esta central hidroeléctrica. La comunidad de Ubalá no ha permitido el ingreso vehicular de las personas que hacen esta función. Hay que tener en cuenta que la Central Hidroeléctrica El Guavio representa 35% de las unidades equivalentes con las que cuenta el área oriental del país para el control del nivel tensión, informó Enel. Esto ha generado que se aplacen mantenimientos en otras plantas del país, traduciéndose en mayores costos energéticos y en la pérdida de la confiabilidad en el suministro del Sistema Interconectado Nacional (SIN), afirma la empresa.

Las manifestaciones se dan principalmente debido a la insatisfacción de la comunidad de Ubalá frente al estado de las vías. Esta función está a cargo de la Gobernación de Boyacá y Cundinamarca, a quienes anteriormente se les había solicitado una solución. La empresa, en ese sentido, también ha dicho que la situación ha violado el derecho a la libre locomoción de los trabajadores, además de poner en riesgo toda la operación de la central. “Enel Colombia respeta el Derecho a la Protesta Social, pero rechaza aquellos actos que ponen en riesgo el bienestar y la seguridad de las personas, y la del sistema eléctrico colombiano”, dijo en un comunicado.