“La tradición está en seguir respetando calidad y procesos de productos que hacemos”
martes, 29 de agosto de 2023
Astor acaba de llegar a 93 años de sus operaciones. Según el gerente, para el primer centenario hay que apuntar por lo saludable
Rafael González
Un negocio gastronómico es un compromiso que se renueva día tras día. Uno de los ejemplos es repostería Astor, esta compañía, que nació en 1930 de la mano del suizo Enrique Baer y su esposa Anny Gippert, hizo de la repostería artesanal una marca registrada que, desde Medellín, logró ser reconocida a nivel nacional.
Hoy la repostería que es una compañía con 170 empleados, logró transformar su formato tradicional de consumo en sus puntos de venta para lograr un canal de distribución de domicilios robusto para llevar la calidad de sus productos artesanales a sus clientes como los famosos ‘moros’, dijo su gerente Carlos Silva.
Cerca de cumplir su centenario, los retos están planteados para seguir en la vanguardia de la repostería tradicional en un mercado cada vez más competido, en especial por los productos importados y las grandes superficies.
¿Cómo reciben estos 93 años y cuáles son los retos para lo que viene?
El mayor reto es mantenerse. Es una realidad que en repostería Astor hoy hay una gran variedad de opciones de productos, pero el que nos lleven todavía en el corazón nos hace seguir con esa tradición suiza desde 1930 intacta.
Vamos a seguir respetando los procesos, la calidad del producto. En estos momentos lo que queremos mostrar es que seguimos vigentes como marca, que ya estamos proyectándonos para los 100 años, pero la mayor responsabilidad de nosotros creo que es también con nuestros colaboradores, que son 170 familias.
Para muchas personas pueden pensar que al llevar 93 años en el mercado ya estamos del otro lado. Que ya no hay nada más por hacer, pero al contrario. El mayor reto de nosotros es todos los días, todas las temporadas y todos los años es mirar qué más podemos hacer y qué le podemos entregar a la ciudad y al país.
Cumplir esa cantidad de años significa que algo se ha hecho bien y hay que reafirmarlo día a día.
¿Cómo cambiar a productos para una población que cada vez exige alimentos más sanos?
Para la repostería tradicional es uno de los mayores retos. Primero porque sustitutos no son tan fáciles de sacar por el resultado que da en el proceso. Tenemos una línea de productos sin azúcar añadida. Uno de los últimos productos que sacamos fue una torta gluten free, que también ha sido muy bien aceptada. También creamos una línea de chocolates saludable. Hay que apuntarle a esa cocina saludable.
¿Cómo cambió el negocio de la repostería tras la pandemia?
Uno de los cambios es que a todos nos tocó acomodarnos al tema de la distribución del producto. Antes de la pandemia hacíamos 1.000 domicilios anuales, o sea unos cuatro o cinco diarios. El año pasado terminamos haciendo casi 10.000.
Nos tocó generar una estructura interna de personal dedicado a esa labor. Fortalecimos la parte logística y reformamos los empaques. Sentimos que se quedó ese cliente fiel a ese canal de domicilios quedó. Obviamente el volumen bajó después de la pandemia, pero se siguió consumiendo mucho producto por la vía del domicilio. El otro cambio fue las ventas por internet. Hoy tenemos e-commerce. El siguiente paso que queremos dar ya es el tema de una venta a otras zonas del país. La elaboración de nuestro producto sigue siendo artesanal y respetando las materias primas.
Las fechas más importantes
En el caso de la Repostería Astor, el segundo semestre del año es el más fuerte porque tienen fechas muy significativas comercialmente, entre ellas la Feria Flores (agosto), viene Amor y Amistad (septiembre), Halloween (octubre) y Navidad (diciembre). Según la compañía, le apuestan a un muy buen cierre de 2023 que si mantiene cifras de 2022 fue para sería bueno en cuanto a números. “El resurgir después de pandemia fue bueno. Estamos esperando por lo menos, no sé, terminar en al menos en algo de crecimiento este año”, dijo Carlos Alberto Silva, gerente de Repostería Astor.