“Las suscripciones han subido bastante, nosotros somos como el Netflix del café”

Uno de los problemas del sector cafetero es que el grano suele almacenarse por varios meses, por lo que la frescura y sus sabores pueden perderse con el paso del tiempo. Los fundadores de Café Devoción, creada en 2006 en Estados Unidos, entendieron el problema de la calidad de los productos, por lo que decidieron enfocarse en brindar un café colombiano casi recién molido.

Elliot Sutton, gerente general para Colombia de la empresa, le contó a LR su historia, el diferencial del mercado que tienen, así como el modelo de suscripción de la empresa.

¿Qué planes de expansión tienen para la marca?

Hoy en día tenemos cinco tiendas y la sexta está en camino, todas ubicadas en Nueva York. Sí vamos a salir a otros países, pero primero explotaremos esta ciudad, porque es uno de los mercados más complejos.

Yo puedo tener 100 puntos en Nueva York y creo que todavía no se cubre en su totalidad.

¿Qué diferencial tiene el Café Devoción?

Identificamos que el café especial estaba empezando a hacer bulla en los mercados de Estados Unidos, y Colombia es el único país que tiene café fresco produciendo todo el año.

Nos empezamos a dar cuenta y a entender un poco, que en el momento que se tritura el café, empieza un proceso de oxidación natural como de cualquier alimento y va perdiendo propiedades. Fue algo que nos llamó la atención y empezamos a jugar con este tema de la frescura.

Vendemos servicios y propuestas de café; estamos categorizados como uno de los mejores productos en calidad.

¿Cómo hacen los colombianos que quieran su café?

Empezamos a vender por nuestra página web para llevar la experiencia del café fresco a Colombia. Las suscripciones se nos han subido mucho, somos como el ‘Netflix del café’.

¿Cómo llevan esa frescura a sus clientes?

Normalmente, en el mercado estadounidense, el proceso de tostar un café verde dura entre tres a nueve meses y con nuestros procedimientos el tiempo baja a menos de un mes con la tostadora que tenemos en Bogotá. En menos de seis meses ya éramos tendencia, le vendemos a uno de los mejores restaurantes: el Eleven Madison Park.

¿Cómo transportan el café?

Tenemos más de 500 fincas activas hoy en día y empezamos a ir a todas estas regiones para recoger el producto.

Para llevar todo esto tenemos una alianza con FedEx, con el fin de llevar este grano muy rápido y tostarlo para mejor frescura, por lo que les dijimos a la empresa de transporte que creyera en nosotros y nos diera una tarifa especial. Somos el cliente número uno de café verde a nivel mundial para FedEx.

¿Venden café en Colombia?

En Colombia seguimos siendo los más grandes y pioneros de café especial en el área horeca institucional. Sí vendemos café tostado desde Colombia a los supermercados en Estados Unidos, pero no comercializamos el producto en los mercados nacionales.

Para los supermercados de Estados Unidos creamos otra marca que se llama Veneto, en la que hacemos lo mismo, de traer el café más fresco volando con la empresa FedEx. Distribuimos la marca Rancilio.

La sostenibilidad y el campo colombiano

Elliot Sutton, gerente general Colombia de Café Devoción, dijo que la empresa buscó materiales reciclables y compostables para la elaboración de sus empaques. El directivo destacó también que uno de los problemas en el agro colombiano es que las nuevas generaciones no se quedan a trabajar, por lo que los cultivos se pierden.

Por esto, la empresa le paga mejores precios a sus caficultores nacionales, para que estos puedan subsistir del café y también van a los pueblos a enseñarles a los niños el valor que tiene el grano y que de esto se puede llevar una vida plena.