Famisanar es la EPS bajo intervención estatal que registra mayor patrimonio negativo

La saga de la crisis de la salud sigue. El último episodio fue la confirmación sobre la continuidad de la intervención de Famisanar durante un año más. La medida va a hasta el próximo 15 de septiembre de 2026. Así, la EPS llegaría a su tercer año bajo el control estatal.

Si se revisa el panorama de las EPS intervenidas, excluyendo a Nueva EPS, el patrimonio negativo de estas llega a los $10,02 billones, donde la caída financiera de dos empresas desciende hasta tener patrimonio negativo superior al billón. En específico, de las ocho EPS con estados financieros actualizados, seis tienen patrimonios negativos que superan $1 billón.

Para la claridad del análisis, no se tiene en cuenta a Nueva EPS porque no ha presentado balances de 2023 y 2024. Y EPS Sanitas se contabilizó en el listado ya que, en ese periodo, estaba bajo intervención.

La interventora de Famisanar, Cris Reyes Gómez, dijo que “los resultados muestran mejoras concretas en salud materna, nutrición infantil, prevención y oportunidad en la atención. Esta prórroga nos permitirá consolidar las acciones en gestión del riesgo, profundizar el trabajo en territorio y fortalecer la red para responder de manera segura a nuestros afiliados”. Sin embargo, la salud financiera de la entidad, bajo la intervención, se ha deteriorado.

De acuerdo con el balance de la compañía, la compañía presentó un patrimonio de -$2,39 billones, con un decrecimiento trimestral de -9,13%.

La interventora de Nueva EPS, la que tiene más afiliados en Colombia, Gloria Polanía, hizo un llamado a la calma, luego de que el presidente Petro revelara el desfalco en la entidad, al afirmar que “la salud de nuestros afiliados está asegurada. La investigación que adelantan los entes de control no afecta la continuidad de los servicios de salud que ofrecemos, llegamos con el compromiso de desarrollar un trabajo de estabilización y la reapertura de servicios en la que hemos venido avanzando”.

A pesar de esta reactivación, y llamado a la calma con la intervención, las cifras no respaldarían la eficacia de la medida del Gobierno para maniatar la crisis de la salud. De las cinco EPS que tienen peores cifras patrimoniales, cuatro cumplirán, en 2026, su tercer año de bajo control estatal, mientras que la quinta, EPS Sanitas, ya fue entregada al Grupo Keralty, luego de que la Corte Constitucional decidiera dar marcha atrás la intervención del Ministerio.

En términos de decrecimiento de los patrimonios, al comparar los datos de la SuperSalud en los dos últimos periodos donde hay datos, recogidos también por el centro de pensamiento Así Vamos en Salud, indican que la mitad de las EPS tuvieron un patrimonio inferior en el primer trimestre de 2025, frente al cierre de 2024.

Las entidades que han visto sus patrimonios descender son Famisanar, Savia Salud, EPS Sanitas y Coosalud. Esta última tuvo el bajón más grande, de -26,87% en tan solo un trimestre, al pasar de un patrimonio de -$859.167 millones, a finales del año pasado a uno que supera los -$1,09 billones, una vez finalizado el primer trimestre de este curso: periodo de los últimos estados financieros.

Desde gremios como la Asociación de Laboratorios Farmacéuticos, Afidro, se ha venido advirtiendo en la necesidad de modificar el sistema para evitar el descalabro financiero.

El presidente ejecutivo de la agremiación, Ignacio Gaitán, ya había señalado, desde el comienzo de la crisis de medicamentos, que “creo que nuestro sistema tiene un alto estrés de financiamiento, porque es un sistema que llegó a tales niveles de excepcionalidad que tiene coberturas revisables, que tiene temas revisables definitivamente, pero que primero no podemos desconocer lo más importante y es que son los pacientes. Si continúa así el sistema, no va a ser viable, porque vamos estar toda la vida en una conversación infinita de la insuficiencia del sistema”.