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Impresión 3D desembarcó en la Costa Caribe colombiana

Germán Corcho Tróchez

La impresión 3D tiene campo abierto en sectores como la manufacturera, salud, confección, construcción y gastronomía. De hecho, hasta ahora ha estado reservado para la industria, pero su utilidad ya se ha expandido a los  educativo y doméstico. 

Según Aguilar, de 24 años, la decisión de meterse de lleno en el mercado 3D se tomó al conocer dichas bondades. “Maneja una filosofía de comunidad, de compartir soluciones, y queremos que los consumidores colombianos cambien su forma de pensar y no sean cerrados”. 

Las impresoras importadas por Smartnet tienen distintos usos: domésticas e industriales. Las primeras son la Witbox y Prusa 13, de la española BQ Readers, UP (China) y Beever Creative (Portugal), que imprimen en polímero y a un color (parecido al plástico) los objetos diseñados en un software. Sus precios para el público varían entre $1,5 millones y $3,9 millones.

“Los  fabricantes están centrados en crear la necesidad en los hogares, pero los usos ya se ven en áreas como la automotriz, para generar prototipos; construcción, para la elaboración de maquetas; arte y joyería, y en moda se está haciendo vestimentas”, afirmó el emprendedor. 

Los modelos industriales traídos al país fueron dos impresoras 660, de la misma firma BQ Readers. El valor comercial de cada una asciende a $150 millones, y su  impresión es en resina (similar al yeso) a full color. Estas, no obstante, serán operadas por Smartnet para prestar servicios. 

CAPACITARÁN CLIENTES

Luego de la ‘Expo 3D’ realizada en agosto (ver recuadro), Smartnet ha recibido solicitudes de ocho empresas  para que empleados suyos reciban capacitación en impresión en tercera dimensión. Incluso, de personas que ya poseen impresoras 3D, pero no las usan por no saber cómo. Por eso, su nuevo proyecto es la apertura del Instituto Creadores 3D en Barranquilla. 

“Antes de adquirir la tecnología, queremos que nuestros clientes tengan el conocimiento para utilizarla y se creen condiciones de mercado; por eso a quienes compren una se les ofrecerá que tomen el curso, a cambio de la devolución de $300.000”, indicó Aguilar.