La Alianza de Empresarios que Salvan Vidas ejecuta más de $23.000 millones

Los recursos recolectados permitirán, en primer lugar adquirir 145 nuevas unidades permanentes de cuidado intensivo critico (UCI) para 6 hospitales fundacionales y universitarios que atienden a todas las EPS y al régimen subsidiado, que han sido priorizados de acuerdo con un estudio de capacidad de atención adelantado por expertos.

Lo anterior significará un incremento del 15% en la capacidad instalada de UCI de Bogotá, con respecto de las 967 camas existentes, y del 29% en la capacidad de UCI dispuestas para covid-19 en la ciudad. Esta inversión significará un aumento de dos camas UCI por cada 100.000 habitantes, pasando de 13 a 15, con lo cual Bogotá se aproxima a los estándares de los países mas avanzados.

Esto permitirá que en el marco de la emergencia, en un lapso de 6 meses, se puedan salvar alrededor de 2.800 vidas. Estas UCI elevan la capacidad instalada de la ciudad con un impacto para los próximos 10 años.

Un segundo aspecto que se fortalece en la ciudad son los elementos de protección de personal hospitalario (EPP). Se benefician 13 hospitales de la región capital, 9 hospitales de la red pública y 4 privados. Particularmente, se brindará una dotación promedio por hospital de 55 días en términos de mascarillas, y de otros elementos destinados a hospitales distritales como batas anti-fluidos, trajes de mayo, visores de seguridad, gorros, mascarillas quirúrgicas, polainas, guantes esterilizados y trajes enterizos de protección.

En tercer lugar, la Alianza Empresarial Contra el Coronavirus ha dispuesto también $3.300 millones para los programas que adelantan la Universidad de los Andes y la Universidad del Rosario se adquieran cerca de 25.000 pruebas moleculares de diagnóstico del covid 19 para Bogotá y la región.

El enfoque será para realizar estas pruebas a personas atendidas en 14 hospitales de la ciudad y a los profesionales de la salud de las mismas instituciones que debido a su trabajo se encuentran expuestos al contagio.

“Estas donaciones serán de gran utilidad para hacer frente a la crisis del Coronavirus. Incrementar la capacidad de las unidades de cuidados intensivos, proteger a nuestro personal de la salud y salir a hacer diagnósticos tempranos, nos ayudará a darle una mejor gestión a esta crisis y superarla minimizando sus costos. Las camas de UCI y equipos adquiridos, una vez superada la pandemia, serán un legado para los próximos 10 años que le deja el sector privado a Bogotá y la región capital", afirmó Juan Carlos Pinzón, presidente de ProBogotá.