"La universidad debe mantener la capacidad de transformarse desde adentro": Alejandro Gaviria

El exministro de Salud, Alejandro Gaviria, se posesionó hoy como rector de la Universidad de Los Andes, asegurando que debe ser ejemplo de diversidad, sostenibilidad y apertura intelectual. Al mismo tiempo, mencionó que debe mantener la capacidad de innovar y transformarse desde adentro, con apego al énfasis humanístico y la educación liberal.

Durante su discurso de posesión, mencionó su visión de la universidad, el cual resumió en cinco puntos que "representan en conjunto una visión moral de la universidad": publicidad, diversidad socioeconómica, sostenibilidad, innovación, investigación y creación.

En el primer caso, resaltó la necesidad de promover diferentes ideas para impulsar el cambio social e inculcar escepticismo y conciencia critica en la comunidad universitaria.

Con respecto a la diversidad económica, afirmó que la universidad debe mitigar y no amplificar las diferencias sociales, y enfatizó que los esfuerzos al respecto tendrán que "consolidarse y profundizarse".

En materia de sostenibilidad, dijo que la universidad tiene una obligación como comunidad de "cuidar el medio ambiente, dar ejemplo y practicar lo que predicamos", así como la responsabilidad preponderante de promover debates éticos sobre cambio climático, deforestación y fumigaciones.

Frente a la investigación y creación, ratificó su compromiso con esfuerzos creativos, que deben hacer parte de la conversación global con colegas alrededor del mundo. "Deben tocar nuestra realidad y tratar de cambiarla, y la universidad debe participar activamente con sus voces plurales en estos debates", añadió.

En cuanto a la innovación, Gaviria nombró diferentes aspectos como la robotización y nuevas tecnologías de comunicación, factores que consideró "imperativos" en el futuro inmediato de la universidad. A su vez, aseguró que la innovación educativa se ha convertido en una "necesidad existencial".

En sus palabras de agradecimiento, Gaviria aseguró que asumirá esta responsabilidad "con emoción, gratitud y la mejor voluntad del mundo", y subrayó que la universidad debe ser "democraticamente activista y a veces desafiantemente activista".

"La universidad debe ser un ejemplo, un paradigma de la construcciones, legitima de respuestas siempre parciales a nuestros problemas más urgentes. El ensimismamiento no es una alternativa", dijo.

Asimismo, señaló que la universidad debe ser el lugar donde se debaten las verdades incomodas, la creciente institucionalización de la demagogia, las falsas promesas de la medicina moderna, la explotación política de la corrupción y el bienestar de los niños.

"Mi punto es que la universidad debe ser el ámbito en el que la sociedad se mire y se reconozca en el espejo de sus propias faltas", concluyó.