La venta de patinetas eléctricas registró un incremento de 148% en el último año
jueves, 2 de febrero de 2023
Este tipo de vehículo ligero forma parte de las diferentes estrategias de movilidad sostenible. Bogotá y Medellín son las ciudades donde este mercado es más fuerte
A mediados de 2022 se inauguró el Electrocorredor del Eje Cafetero, una red de estaciones de carga rápida de vehículos eléctricos que conecta a Armenia, Pereira y Manizales. Este proyecto, destinado a incentivar el turismo sostenible en la región, tiene una particularidad: cuenta con 39 puntos de carga que funcionan también para patinetas eléctricas.
La inclusión de este elemento en el proyecto de tal magnitud da cuenta del crecimiento que han experimentado las patinetas eléctricas en Colombia durante los últimos años. La plataforma de comercio electrónico Linio estima que las ventas de estos vehículos aumentaron 148% con respecto a 2022.
“En 2022 se vendieron más de 18.000 patinetas eléctricas a través de nuestro marketplace, lo que afirma que este tipo productos con impacto sostenible están teniendo cada vez una mayor acogida por parte de los colombianos”, afirma Alejandra Camacho, gerente del marketplace de Mercado Libre en Colombia.
Así mismo, Fenalco realizó una estimación con seis empresas afiliadas a su comité de movilidad activa, y halló que vendieron 18.491 patinetas eléctricas en 2022, que representan una participación de mercado de 47%. La cifra supera con creces las de las bicicletas eléctricas, con 2.339 unidades, y de las motos eléctricas, con 5.580. En conjunto, se importaron alrededor de 40.000 vehículos de estos tres segmentos el año pasado.
Por su parte, Sebastián Narváez, gerente de Sky Motion, empresa fundada en Medellín, cuenta que 2020 fue un punto de inflexión para el mercado de las patinetas en el país. Pero no por la pandemia en sí, sino por la popularización de las patinetas compartidas, una apuesta realizada por empresas como la mexicana Grin que tuvo gran acogida en Bogotá.
“Ahí la gente empezó a dejar de verlas como un juguete y les cogió el gusto como un medio de transporte. Ahora, los principales motivos que impulsan el negocio son el pico y placa y el tráfico. Hay trancones de una hora que en patineta puedes salvar en 15 minutos”, afirma Narváez.
Sky Motion cuenta con dos marcas: una propia y homónima y la Kaabo. Las primeras pueden tener una autonomía de entre 20 y 90 kilómetros; mientras que las segundas pueden llegar a los 180 kilómetros. Los precios oscilan entre $2,2 millones y $16 millones.
“Las patinetas eléctricas son 25% de nuestro negocio. En 2022 vendimos alrededor de 500 unidades, un volumen de 3.000 millones en ventas”, indica Narváez. Esto representa un crecimiento de 100% respecto al año anterior.
Así mismo, Luis Eduardo Martínez, cofundador de CKT Global, la empresa representante de la marca Segway, uno de los líderes del mercado, afirma que en 2022 se vendieron aproximadamente 3.200 unidades. Se trata de un incremento de 34% respecto al año anterior.
Martínez considera que este año se puede esperar una ligera desaceleración en las ventas por cuenta de diversos factores externos. “Todas las patinetas de Colombia están hechas en China, entonces tenemos complicaciones como el tipo de cambio, que ha encarecido tremendamente estos productos. Y así mismo han aumentado los precios por los chips y por el litio. Sumado todo esto, el escenario es que los productos van a subir de precio”, explica.
CKT Global estima que podría crecer sobre 15% este año. “La movilidad es cada vez peor, entonces el mercado se va a seguir fortaleciendo. Las patinetas eléctricas se han fortalecido frente a las bicicletas convencionales, y también frente a las motos y bicicletas eléctricas, que se han estancado. Entonces realmente el reto es el poder adquisitivo de los consumidores”, añade Martínez.
Sin embargo, Gabriel Gutiérrez, fundador de Minca Electric, señala que estos aumentos por cuenta de la inflación también afectan a todo lo demás, por lo que las patinetas eléctricas son una opción atractiva para reducir costos de transporte.
“El segundo factor es un tema de calidad de vida. En ciudades con densidad de tráfico como Bogotá en las que la gente gasta más de un mes al año en tráfico, la patineta es la mejor opción. Y el tercer elemento que atrae a los consumidores es que implica una reducción inmediata de la huella de carbono”, explica Gutiérrez.
A esto se suma Minca Electric fue fundada en 2017, cuando el mercado de patinetas era desconocido. En 2022, la compañía experimentó un crecimiento de 250%, alcanzando ventas de 2.300 unidades. Cuenta con cuatro productos cuyos precios oscilan entre los $2,5 millones y los $5,2 millones.
“Este año, un problema grande que tenemos es que se acabó el beneficio de arancel de 0% para patinetas eléctricas, implementado por el Gobierno anterior en 2019. El beneficio arancelario se acabó el 15 de enero de 2023, y ahora está en 15%. Estamos conversando con el Gobierno sobre este tema”, afirma Gutiérrez.
La proyección de Minca Electric es comercializar entre 3.000 y 3.500 patinetas eléctricas este año. La compañía está explorando expandir sus operaciones a otros países de América Latina. Se prevé que este año abra dos tiendas en Ciudad de México, y está adelantando la opción de adentrarse en el mercado de Lima.
Esto es, precisamente, porque ambas ciudades cuentan con problemas de movilidad similares que son el caldo de cultivo de este tipo de vehículos. En 2021, Bogotá fue la ciudad latinoamericana donde los conductores perdieron más tiempo en el tráfico, con alrededor de 94 horas al año, según cifras de Statista.
“No obstante, si tenemos en cuenta factores como los aranceles, la devaluación del peso, la inflación y la posible reforma laboral, los precios podrían incrementar en hasta 30%”, indica.