Las siete familias detrás del negocio de los carros

En 2012, se podían contar hasta 14 familias y, hoy día, ese número cayó a siete grupos, que registraron alrededor de $2 billones en el último año. Por un lado, está la empresa Autogermana presidida por la familia Sáenz y que cuenta con las marcas BMW, Mini y BMW Motorrad. Esta compañía familiar, con más de 30 años en el mercado, obtuvo $402.404 millones en ingresos durante 2015. En lo que va corrido del año, hasta julio, se han vendido 1.104 vehículos BMW, y 221 solo en el séptimo mes, lo que trajo un aumento de 10% en ventas frente al mismo mes en 2015 según el informe que realizan la Andi y Fenalco.

La familia Schneider es otra de las superpoderosas de los carros con dos marcas como Porsche y Toyota. Entre estas dos emblemáticas marcas, facturó alrededor de $373.000 millones el año anterior. Hay que recordar que en 2014 se creó la compañía Automotores Toyota Colombia, que se dio gracias a una alianza entre Distoyota y la casa matriz japonesa de la marca. Distoyota se mantuvo como concesionario y se  convirtió en socio de Toyota.

Las familias Losada Salcedo  y Herrera Barona montaron hace casi 60 años la empresa Fanalca, la cual tiene seis unidades de negocio y en 1991 adquirieron la licencia para comercializar los vehículos Honda en Colombia. El comportamiento en ventas de carros de esta marca ha tenido una caída de 28,8% en lo que va corrido de 2016 frente al año anterior.

El núcleo Vargas se ha posicionado hace más de cinco décadas en el país y ha llevado a que la marca Nissan sea la quinta más vendida en Colombia. Al poseer también John Deere Industrial y Hitachi Industrial, registraron ingresos por $1,2 billones en 2015.

A pesar de la novela jurídica y legal que vive la marca Hyundai, Mattos sigue siendo uno de los apellidos con más peso en los automotores y aún pelea  por la distribución de los carros de esta marca coreana. Del lado de Cinascar, el empresario obtuvo más de $105.000 millones en ingresos en 2015, según los datos  que tiene la Supersociedades.

Los Vega-Lara han tenido influencia a través de Motorysa, la cual tiene la distribución de la compañía japonesa Mitsubishi.

¿Qué pasó con las otras familias?
Familias como los Neme, los Pradilla y los Salazar han desaparecido del mapa del negocio automotor o han tomado un rol secundario. “Consorcios como Indumotor, SKBergé y el Grupo Eljuri han desplazado las empresas familiares de automotores nacionales en pocos años”, manifestó Eduardo Visbal, vicepresidente del sector automotor de Fenalco.

Del lado de los Neme, quienes tenían la distribución de la marca Volvo a través de su empresa Chaneme Comercial, se enfrentaron a la llegada en 2013 del grupo chileno-español SKBergé y se quedó con la importación de la marca sueca en el país. Del lado de los Pradilla, dueños de Praco-Didacol, en 2012 fue adquirida por la chilena Indumotora, la cual se quedó con importantes marcas como Peugeot, Daihatsu, Subaru e Hino.

También se ha dado el caso de la llegada del Grupo Eljuri al país el cual tenía Metrokia y, a principios de año, fue designado como distribuidor de la casa matriz coreana de Hyundai, desplazando así a Carlos Mattos, quien tenía la licencia hace más de 20 años. Además, el Grupo anunció que ensamblará carros Volkswagen en Ecuador.

SsangYong Motor Colombia en reorganización
La importadora y exportadora de vehículos y repuestos SsangYong Motor Colombia S.A entró en febrero de este año en cesación de pagos con sus acreedores. Las familias Sardi y Knorpfel, propietarias de la marca que decidieron también entrar en reorganización con China Automotriz, vieron como decrecieron 43% en sus ventas pasando de comercializar 1.369 vehículos en 2014 a 783 durante el último año.

La opinión

Eduardo Visbal
Vicepresidente del sector automotor de Fenalco
“Consorcios como Indumotor, SKBergé y el Grupo Eljuri han desplazado las empresas familiares de automotores nacionales en pocos años”.