Más de 600 pantallas de cine se han apagado en el país por la pandemia del covid-19
jueves, 21 de enero de 2021
A raíz de los cierres decretados en el país el año pasado, las empresas de cine registraron solo 808.000 espectadores, cuando antes recibían cerca de 60 millones
Johana Lorduy
Los exhibidores de cine en el país siguen protagonizando la peor película de terror, al continuar con las salas cerradas debido a las nuevas restricciones, y a la incertidumbre económica que vive la industria ante las restricciones por la pandemia.
De acuerdo con cifras de CadBox (Colombian Adminission & Boxoffice Control) al cierre de 2019 estaban abiertos al público 234 multiplex o complejos de cine, que sumaban 1.217 pantallas. No obstante, al ver las cifras al final del año pasado, solo se registraron 129 espacios abiertos, con 578 pantallas disponibles. Es decir que la pandemia del covid-19 generó el cierre de más de 105 cinemas y produjo que se apagaran más de 600 pantallas. Esto se tradujo en dejar de recibir casi 60 millones de espectadores, a 808.819 en 2020.
Si bien la mayoría de las compañías iniciaron operación el pasado 26 de noviembre, como lo destacó el empresario Munir Falah, presidente de Cine Colombia, en Twitter, la operación de esta compañía continúa cerrada.
Por su parte, las empresas que adelantaron sus reaperturas ahora se enfrentan a otro drama, comentó Pablo Umaña, presidente de Cinemark Colombia, pues con las nuevas restricciones en la capital hay una pérdida de dinero mayor por tener las salas abiertas y no recibir asistentes.
“Las empresas están endeudadas, las que abrimos (Cinemark, Cinépolis, Royal Films y Procinal) ahora estamos nuevamente perdiendo más dinero abiertos, que estando cerrados. Estamos viviendo la crisis más grave y grande de la historia del cine”, dijo Umaña.
Las pérdidas reportadas por esta empresa en 2020 fueron superiores a $70.000 millones. A esto se suma que el pago de arriendos es otro de los puntos delicados, pues hay empresas que están operando, pero no cuentan con los recursos suficientes, ni siquiera, para pagar estos costos fijos o los servicios públicos.
Por ejemplo, Cinemark tuvo que cerrar cinco complejos de cine en el país por falta de entendimiento con los arrendadores.
Para el director de operaciones de Cinépolis para la región andina, José María Ortega, la preocupación también se enfoca en los miles de empleos que se han perdido y que no se han podido recuperar. Hasta la fecha, y con pérdidas que superan $20.000 millones, la compañía ha tenido que suspender a más de 650 colaboradores y actualmente solo ha reactivado 20% de su operación.
“Operar un número acotado de salas acorde a la oferta de películas, tener una oferta básica de productos de confitería, operar con el mínimo posible de personal y negociar con nuestros arrendadores y acreedores, planes de pago que nos permitan subsistir, han sido algunas de las medidas tomadas. Pero no es suficiente”, agregó Ortega.
El empresario Munir Falah, en entrevista para el podcast ¿Hacia dónde Vamos? de Scotiabank Colpatria, alentó a los empresarios para que no se desesperaran frente a la crisis y les recomendó ajustar sus líneas de negocio, como ellos habían hecho en CineColombia.
“Esta no es una situación que un empresario pueda controlar (…) en lo posible, si pueden ajustarse a negocios distintos o complementarios hacerlo inmediatamente”.
El panorama en Estados Unidos
Según estadísticas de CadBox (Colombian Adminission & Boxoffice Control) en 2020, la caída en espectadores en los Estados Unidos, uno de los mayores productores de películas en el mundo, fue de 81,6%. Así mismo, la caída en la taquilla fue de 81,7%, teniendo en cuenta que los asistentes fueron al cine durante los meses de enero, febrero y marzo.
Hay que agregar que el año pasado, por cuenta de la pandemia, solo se logró recoger en taquilla cerca de US$2.085 millones, mientras que la cifra para 2019 fue de US$11.400 millones.