Mineras, enfocadas a retomar el ritmo en el cuarto trimestre

Con un tercer trimestre que arrancó enmarcado por los paros en todo el territorio nacional, y en los cuales los pequeños mineros han tenido un importante papel, ahora el mayor reto de las empresas del sector está en proyectar su actividad durante el cuarto trimestre, para evitar que las operaciones se vean afectadas por algún inconveniente y poder retomar así los niveles de crecimiento de la actividad.

Y esto se traduce en que las empresas deben asumir que la minería pasa por un momento complejo, que requiere tanto de medidas de las compañías, como del Gobierno y la comunidad. En especial, porque hay que reconocer que las diferentes problemáticas que se han presentado han corrido por cuenta de todos los actores.

Por un lado, no está de más retomar los paros a las actividades que se dieron durante el primer trimestre en las dos principal carboníferas del país: en Drummond, debido al carbón que fue arrojado al mar y por lo cual  la Anla le suspendió la licencia de cargue y descargue de carbón en el puerto de Santa Marta tras haber realizado una inspección; Y en Cerrejón, por el paro de trabajadores que en los primeros meses del año le generó a la compañía  pérdidas  por $156.000 millones, aproximadamente.

Y como si fuera poco, a eso se han sumado una serie de percances con las actividades de Ferrocarriles del Norte de Colombia, Fenoco. Dentro de estos, a comienzos de año, se vio obligado a detener la operación de los trenes,  acatando la restricción que impuso la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar.

Pero, pese a los esfuerzos de las empresas y el Gobierno, los inconvenientes se han mantenido durante el transcurso del año.

Más recientemente, la carbonífera Drummond ya completó más de dos semanas desde que inició el paro de los trabajadores, en el que están involucrados unos 5.000 empleados directos y más de 4.000 contratistas. Debido al cese de actividades, también se ha visto paralizada la economía de  las comunidades aledañas.

Sin embargo, al Gobierno también le resta un segundo semestre que demandará aún más esfuerzos, pues entre las protestas en Vetas y California, Santander, y el paro de los pequeños mineros, la economía de la locomotora comienza a colocarse en entredicho.

Y cabe destacar que, luego de que el pasado martes se hicieran esfuerzos para levantar el paro, los pequeños mineros  señalaron que extenderán el cese de actividades, por lo cual se sumarán al paro generalizado que se tiene previsto comenzará este lunes 19 de agosto.