Monómeros cae en polémica por supuesto envío de dinero a gobierno de Maduro

Información mediática que señaló una posible entrega irregular de dinero tiene a Monómeros navegando en aguas muy tormentosas. Y según trascendió, en los estados financieros de la compañía correspondientes a 2023 se reflejó una transferencia de US$30 millones a Petroquímica de Venezuela, Pequivén, controlada por el gobierno de Nicolás Maduro.

Cuando iniciaba el periodo presidencial de Gustavo Petro, se acordó retornar el manejo de Monómeros al Ejecutivo venezolano. Sin embargo, Armando Benedetti, quien entonces fungía como embajador en el vecino país, indicó que uno de los acuerdos sellados consistía en que las ganancias de la compañía se quedaban en Colombia.

“Las ventas que tenga Monómeros, los dividendos, las ganancias, no se los van a llevar para Caracas, para Venezuela, se van a quedar aquí en Colombia, reinvirtiéndose”, afirmó en aquella ocasión el hoy embajador de Colombia ante la FAO.

Ya hubo revisoría

El tema fue tomando fuerza y ayer Monómeros rechazó la información que la vinculaba con la presunta entrega irregular de los US$30 millones.

A través de un comunicado, la empresa defendió que compartió con los diversos grupos de interés su informe de sostenibilidad para el ejercicio de 2023, “el cual permite conocer los asuntos empresariales, financieros, comerciales, operacionales, ambientales y sociales de nuestra compañía”.

La compañía agregó en su pronunciamiento que “los estados financieros correspondientes al ejercicio económico del año fiscal de 2023, fueron auditados por la Revisoría Fiscal, los cuales presentan una opinión sin salvedad”.

La Superintendencia de Sociedades, entidad que tiene medida de vigilancia a Monómeros, se pronunció y aseguró que, con corte al 31 de diciembre de 2023, “no hay evidencias de presuntas irregularidades en su funcionamiento”.

De acuerdo con la entidad, la empresa terminó el ejercicio del año pasado con activos por $1,4 billones y con pasivos por $903.919 millones. Además, el patrimonio totalizó $583.043 millones.

Billy Escobar, superintendente de Sociedades, señaló que en el caso de Monómeros se han observado avances “y oportunidades de mejora en su situación financiera, mediante la disminución de sus pasivos, el incremento de su patrimonio y las ganancias, así como el mejor desempeño de algunos de su indicadores financieros”.

“En ese sentido, continuamos con nuestra supervisión dirigida a promover e incentivar eficiencias que redunden en la mejora general de su situación financiera”, agregó.

Rafael Felipe Gómez, especialista en derecho comercial, indicó que “bajo una óptica general, se estaría hablando de una transacción sencilla entre una filial y su matriz. Sin embargo, la cuestión acaba más orientada a si, efectivamente, el Gobierno colombiano lo que ha hecho es permitir una transacción que no tiene un sustento distinto al de quitarle o restarle capitalización a Monómeros”.

La empresa está bajo vigilancia debido a su peso entre los proveedoras de agroinsumos en Colombia: atiende 50% del mercado nacional.

Gustavo Petro negó el hecho

En medio de la controversia, Petro se pronunció y aseguró que se trata de una “calumnia”, dado que la información que circula lo señaló de tener injerencia en la supuesta irregularidad.

“Debo desmentir el monstruo de calumnia que montaron diciendo que yo había enviado a Maduro US$30 millones. Evité que a Monómeros se la robaran funcionarios del anterior gobierno y el gobierno ficticio de Venezuela”, escribió el mandatario en X.

Además, defendió que “Monómeros, ubicada en Barranquilla, a punto de ser cerrada, se entregó a su legítimo dueño: Pequivén y esta empresa la refinanció. Es decir trajo dinero a Colombia y no al revés, y con eso se reanudó la operación de compra de urea barata y con ello logramos detener el alza de alimentos para las familias”.

“Es uno de los grandes éxitos de mi gobierno que ahora periodistas deshonestos intentan criminalizar cambiando la realidad transformándola en su contrario: la mentira”, añadió.

Monómeros emitió un comunicado en el que aseguró que es una empresa con 56 años de trayectoria en el mercado y afirmó que se sujeta a los procedimientos y estándares de cumplimiento del orden nacional e internacional.

“Rechazamos cualquier tipo deinformación que ponga en duda nuestros esfuerzos, seriedad y responsabilidad social”.