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“No se ha creído en las vías fluviales como una alternativa de transporte”

Miguel Pardo/LR

María Alejandra Solano Vargas

Pese a la importancia de esta arteria fluvial, para Alejandro Costa, gerente de Impala Colombia, “el Río Magdalena no ha tenido el apoyo que se necesita, pues en Colombia no se ha creído en las vías fluviales como una alternativa para el transporte”.

Sin embargo, este es un panorama que, según él,  está cambiando gracias a los inversionistas privados. Tan solo Impala ha aportado recursos del orden de US$1.000 millones en los últimos años, de los cuales US$470 millones se destinaron al Puerto de Barrancabermeja, que servirá a este afluente. 

“Hoy la oportunidad está creada. El Río Magdalena es la vía de cuarta generación  por excelencia, es la fuente de desarrollo que necesita Colombia”, enfatizó Costa.

El gerente de Impala agregó que muy pocos países en el mundo tienen un río con las oportunidades que tiene el Magdalena.

Actualmente, el corredor posee  650 kilómetros navegables, los cuales pasan por 129 municipios; también recorre siete sociedades portuarias.  Además, es una oportunidad clara para la implementación del multimodalismo.

La movilización de carga es mucho más eficiente en cuanto a  beneficios ambientales. Mientras que un camión recorre 250 kilómetros con un galón de gasolina y un tren, 660 kilómetros; con el transporte fluvial se transita 920 kilómetros.  

El empresario reveló que son siete millones de toneladas de carga el potencial que se puede mover en el Río y que hoy son transportadas por vía terrestre.

La reducción de los gases efecto invernadero también es amplia. Por ejemplo, para carga líquida alcanza 67% y para carga seca, 56%.