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Panamera: el Usain Bolt vestido de frac

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Ripe

Motores, plataforma, tecnología, carrocería, equipamiento, materiales, dimensiones... Todo cambia, incluso su diseño, que aunque sea similar se ha estilizado y hecho aún más elegante.

Un ejemplo: la primera generación del modelo alemán funcionaba gracias a dos millones de líneas de código informático en sus sistemas. La segunda cuenta con 100 millones.

Todos estos cambios logran el objetivo de conseguir no solo el espacio, confort y lujo de las mejores berlinas, sino también una contundente deportividad marca de la casa. Tuvimos ocasión de experimentarlo en el circuito de Lausitzring, donde ingenieros de la marca nos dieron varias vueltas a sus 4,5 km de largo. Probamos la versión Turbo Sport Chrono, que cuenta con 550 caballos y 770 Nm en su motor V8 biturbo y hace el 0-100km/h en 3,4 segundos (3,6 s en la versión Turbo normal) con una velocidad máxima de 306 km/h.

Son cifras que ya hablan por sí solas, pero las sensaciones en pista acreditan que el Panamera podría pertenecer a un responsable padre de familia un tanto bipolar que en pista también es capaz de romper el cronómetro y hacer tiempos de piloto profesional. Esto no es un brindis al sol: el Panamera logró 7:38 minutos en el anillo norte de Nürburgring, un tiempo sólo al alcance de los mejores superdeportivos.