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Por devaluación, Juvenia pide su reorganización

Melisa Echeverri

La compañía ha sido una de las más golpeadas por la fluctuación de la divisa, pues su portafolio de productos está compuesto por marcas importadas como Victorinox, Swissgear y Swarovski. Ante este panorama, la firma encontró más difícil cumplir con sus deudas, por lo que debió pedir a la Supersociedades el aval para una reorganización debido a la cesación de pagos.

Ante el órgano de control, notificó que se encuentra en mora con el pago de sus obligaciones por más de 90 días y con más de dos acreedores. De hecho, según el auto de la Supersociedades, “estas obligaciones representan más de 10% del pasivo total a cargo de la empresa al 31 de agosto de 2016. Las obligaciones vencidas superaron los $4.033 millones, lo cual representa 45,9% del pasivo total”.

La entidad negó la aplicación de este recurso debido a que la firma no cumplió con los requisitos exigidos por ley. Aun así, dejó la puerta abierta para que completara la información y  presentara nuevamente una solicitud de admisión a reorganización, de acuerdo con el documento de la entidad.

A pesar de la decisión de la Supersociedades, Juliana Muñoz, directora administrativa de Juvenia, dijo que se va a seguir adelante con el proceso de reorganización.  De acuerdo con el superintendente Francisco Reyes, la persistencia con este recurso se debe a  la necesidad de “preservar  las empresas viables y normalizar sus relaciones comerciales y crediticias”.

Aunque la intervención de la entidad dé un alivio, para Guillermo Navarro, socio de Muñoz Abogados, es importante que en el proceso se analice “cómo volver más productiva a la empresa, reducir costos o diversificar sus productos”.

Las importadoras están optando por  este proceso

Según Guillermo Navarro, de la firma Muñoz Abogados, el alza del dólar ha obligado a muchas compañías a reorganizarse, pues han estado cerca a la quiebra en tan solo seis meses con un dólar sobre los $3.000. Por lo tanto, lo aconsejable es hacer un acuerdo con los proveedores y otros participantes de la cadena de valor. Además, es importante que el deudor tenga un plan que contemple no solo la reestructuración financiera sino organizacional.