Viva y Avianca están a la espera de una decisión de la Aerocivil sobre la integración
jueves, 16 de marzo de 2023
El sí o el no a la integración, según falle la Aerocivil, no es la única noticia que esperan, también puede llegar una multa
Viva Air y Avianca siguen pendientes de la luz verde por parte de la Aeronáutica Civil para integrarse, luego de haberlo solicitado en agosto del año pasado. Según el Ministerio de Transporte en cualquier momento la Aeronáutica Civil le daría solución al fallo.
Esto hace parte de solo un grupo de noticias por la que esperan ambas aerolíneas. Por ejemplo, si les permiten avanzar a la integración irían por la mayoría en el mercado de transporte aéreo, de hecho se habla de un control sobre 69% de los slots de la aviación (permisos de horarios para utilizar aeropuertos) pero si no, sería un problema para el turismo en general.
Según ambas compañías, darle la negativa a la unión equivale a que Viva no tiene cómo salvarse en su camino a la quiebra y por ende habría un hueco en 34 rutas nacionales y 11 internacionales, un golpe fuerte para los viajes, especialmente a pocos días de que llegue Semana Santa si se tiene en cuenta que Viva ya tenía casi 20% del mercado en Colombia.
La noticia amarga
Otro posible camino en la novela Avianca-Viva está en que independientemente se resuelva la integración o no, es posible que lleguen multas.
En medio de este proceso, en diciembre de 2022, la SIC publicó una resolución en la que expuso que en realidad las dos aerolíneas ya estarían integradas. Señaló que la empresa que adquirió los derechos económicos de la low cost habría dejado de competir con esta (Avianca).
“La adquisición de los derechos económicos sobre Viva Air y Viva Perú por parte del grupo empresarial al que pertenece Avianca habría sido determinante para el desempeño competitivo de aquellas aerolíneas. En particular, habría eliminado los incentivos que Viva Air y Viva Perú tienen para ejercer presiones competitivas contra Avianca, y en el mismo sentido, habría eliminado los incentivos de esta compañía para competir efectivamente contra Viva Air y Viva Perú”, señaló la SIC en su investigación.
En caso de que se confirme que esta integración ya se había dado antes, Andrés Palacios Lleras, experto en Derecho de la Competencia y profesor de la Universidad del Rosario, expuso que “los miembros de la Junta Directiva a los que se les compruebe que participaron en las conductas serían responsable ante la SIC, por temas de competencia y además a nivel societario, y frente a los acreedores”.
Refirió que la multa para los directivos podría ser hasta 2.000 salarios mínimos (es decir $2.320 millones teniendo como base el aprobado para este año).
Así se llegan a 10 cambios para Viva Air en caso que la Aerocivil diga sí o no a la integración.
Si se integra
Avianca asumirá la deuda de $4 billones que tiene en quiebra a Viva Air. Palacios expuso que la aerolínea podría terminar asumiendo responsabilidades ante acreedores y autoridades que tiene la low cost. Esto podría hacer más tardío el retorno de la inversión que ya hizo Avianca. “Es posible que Avianca vea más demorada el retorno a su inversión en Viva, y que termine siendo menos de lo esperado, precisamente por las demandas e investigaciones que enfrenta y por supuesto por la competencia de las otras aerolíneas”, indica.
Viva Air tendría respaldo de Avianca en una posible reorganización empresarial, por lo que podría alejarse de una liquidación. Juan Felipe Reyes, experto aeronáutico de Parra Rodríguez Abogados, indicó que la aerolínea que adquirió los derechos económicos de la low cost respondería por esta para cuidar sus intereses económicos. Así mismo, la empresa podría tomar vuelo y reactivar su operación. Juan Fernando Puerta, abogado aeronáutico de Cuatrecasas, sostiene que existe “la posibilidad de obtener recursos frescos con ocasión a la integración”.
Viva reactivaría su operación, tal como comunicó la compañía el día que cesó sus actividades. “Trabajaremos para preservar su capacidad de reiniciar las operaciones en una fecha futura, suponiendo que la Aeronáutica Civil apruebe de inmediato la alianza pendiente”. Puerta agrega que, al no tener nuevos recursos, “se imposibilita la reactivación de las operaciones en Colombia”.
La participación de los slots de las dos compañías sería del 69% en el Aeropuerto El Dorado. Estos hacen referencia a la asignación de horarios de aterrizaje y despegue que se les proporciona a las aerolíneas para realizar un trayecto. Según la Aerocivil, la participación de slots de Avianca en Bogotá es en promedio de 44%. “La operación de integración con Viva Air podría llevar a limitar el uso de la infraestructura de otros operadores y aerolíneas, evidenciando así un riesgo competitivo”, sustenta la superintendencia en su investigación.
La unión de las dos compañías representa 60% del mercado de transporte de pasajeros regulares domésticos. La empresa con mayor participación, entre enero y septiembre de 2022, fue Avianca con 39% del total de los pasajeros transportados. Viva abarcó 21%. De manera que, al estar unidas representaría más de la mitad del mercado total. También del total de rutas, dice la SIC, 63 abarcarían más del 40% del mercado.
Si no se integra
Hay una mayor posibilidad de liquidación de la empresa, al no contar con capital para salir de la crisis financiera. “Si no se aprueba la integración con Avianca, el panorama para Viva podría empeorar, pues sin ese apoyo lo que puede seguir es su liquidación”, indica Juan Felipe Reyes, abogado aeronáutico de Parra Rodríguez Abogados. Diego Márquez Arango, director de MQA Abogados, sostiene que al no darse la integración, “todo conduce a que Viva desaparecería en el tiempo, a menos que consiga algún inversionista en los escenarios de reorganización”. También Palacios expone que en este escenario, el proceso de reorganización empresarial, que evalúa la Superintendencia de Sociedades, “rápidamente se volverá un proceso de liquidación”.
Quedará un hueco de 34 rutas nacionales y 11 internacionales donde Viva Air tenía operación. Esto toda vez que la empresa nunca vuelva a reactivar su operación. Antes de la crisis, la aerolínea de bajo costo representaba 18% de la participación en el mercado colombiano.
Viva seguirá siendo el único responsable de la deuda que la llevó al colapso, la cual asciende a $4 billones de pesos. “Si no se aprueba la integración sería un escenario muy crítico para Viva y situación financiera porque no tendría nuevos recursos”, apunta Puerta. De manera que al seguir con sus problemas económicos, continuaría el Proceso de Recuperación Empresarial, al que se acogió y en el que renegoció 18% de su deuda total. Justamente esta semana, la aerolínea comunicó que incluirán a más acreedores en el PRE.
Avianca no podría intervenir. Si bien la empresa está sometida a control por la Superintendencia de Transporte, al negarse la integración no habría posibilidad de que la otra compañía interpele a las autoridades. “Si se aprueba la integración, la sociedad estará controlada, y con muchos ojos encima, pero al menos, Avianca ya podría orientar las decisiones y le corresponderá hacer el ‘forcejeo’ con las autoridades”, indica Márquez.
Viva air solo tendría problemas, entre los que se suman un proceso judicial por estafa, un sometimiento a control, una crisis financiera con deudas por $4 billones hasta antes del cese de su operación, una solicitud de reorganización empresarial y la reparación a los clientes que compraron tiquetes y no pudiera volar. Solo por venta de tiquetes, tiqueteras y recepción de pagos de agencias de viajes, la aerolínea recaudó cerca de $272.000 millones que tendrá que devolver a los afectados.