Yara, Precisagro y Monómeros son líderes en la importación de los fertilizantes
sábado, 22 de noviembre de 2025
Las compañías que más traen fertilizantes están arriba de las 240.000 toneladas al año. Cinco de ellas tienen una cuota de 63,5% en la importación total
El Gobierno ejecutó una nueva movida con la intención, según argumentó, de abaratar la producción de alimentos. Se trata del arancel cero a la importación de 76 subpartidas de insumos agropecuarios, incluidos los fertilizantes; todo con marco en el Decreto 1183, cuya vigencia será de un año.
En Colombia existe toda una industria encargada de abastecer al mercado con fertilizantes y muchas de las compañías que participan en el negocio producen y complementan su oferta con importaciones.
Vale mencionar que los volúmenes traídos desde el exterior no necesariamente corresponden a las ventas totales de una empresa en el país, pues igual pueden realizar compras nacionales a otros actores.
Sobre una nacionalización calculada en cerca de dos millones de toneladas con corte a 2024, Yara lidera las importaciones con unas 365.000 toneladas y una participación aproximada de 18,2% sobre el total.
El podio lo completan Precisagro, con aproximadamente 285.000 toneladas y una cuota de 14,2%; y Monómeros (junto con Ecofértil) con 248.000 toneladas y una fracción de 12,4%.
En la parte media del escalafón aparecen: Nitrofert, con 215.000 toneladas (10,7%), Nutrición de Plantas, con 160.000 toneladas (8%) y C.I. Acepalma, con 100.000 toneladas (5%).
Y la lista la cierran EvoAgro, con 80.000 toneladas (4,0%); Ciamsa, con 70.000 toneladas (3,5%): Manuchar con 45.000 toneladas (2,2%); y Disan 43.000 toneladas (2,1%).
El potencial efecto
Ahora ¿Cuánto se beneficiarán las importadoras con el nuevo arancel de 0%? César Palacio, gerente de ForteAgro, recuerda los decretos 1027 de 2018, 894 de 2020 y 1176 de 2022, que establecían arancel de 0% para varias subpartidas de fertilizantes.
El nuevo decreto 1183 amplía este beneficio hacia la importación de otros fertilizantes, como las mezclas NPK y el SAM.
El impacto para el volumen de las importaciones sería limitado, dado que los fertilizantes deben adquirirse independientemente de la variación arancelaria y los agricultores comprarán lo que necesiten.
Para empresas como Yara -que importa materias primas pero produce fertilizantes en Colombia- la medida aporta estabilidad en una parte crítica del proceso productivo. Sin embargo, el eje de la discusión no es industrial, sino económico: el beneficio final debe llegar al productor, quien asume el mayor riesgo financiero en la cadena.
Colombia cuenta con una base productiva relevante y, desde la óptica de Andrés Useche, vicepresidente de Yara para la Región Andina, la reducción arancelaria no reemplaza esa ventaja estructural; la fortalece. La operación de plantas como la de Cartagena garantiza abastecimiento continuo, menor exposición a choques logísticos globales y una contribución directa a la seguridad alimentaria del país.
“En un sector donde los insumos pueden representar entre 30% y 40% de los costos de producción, cualquier estabilidad regulatoria ayuda a proteger la rentabilidad del agricultor”, añadió.
Expuso que, en este contexto, el arancel 0% es un paso en la dirección correcta, “pero su verdadero valor se materializa cuando se integra a un esfuerzo más amplio: producción local, innovación tecnológica y acompañamiento directo en campo. Ese es el compromiso de Yara, que cualquier mejora en competitividad se traduzca en un beneficio tangible para quien produce alimentos y que maneje lo ambiental”.
Los eslabones de la cadena que deben mejorar para ganar competitividad
Andrés Useche, vicepresidente de Yara la región Andina reconoció la bondad tras el arancel de 0%, pero hizo notar que “la realidad logística del país sigue siendo un factor determinante: trasladar una tonelada desde Europa a Cartagena puede costar cerca de US$50, mientras que moverla de Cartagena a los Llanos puede llegar a US$80. Por eso, la articulación entre importación de materias primas, producción local y distribución regional es clave para que los alivios se reflejen efectivamente en el campo”.