Más de 90% de las obligaciones crediticias en el país presentan un historial positivo
jueves, 6 de junio de 2024
Según datos proporcionados por centrales de riesgo, solo 5% de cada $100 prestados por el sector, experimenta morosidad
La cultura de pago se refiere a las actitudes y prácticas de los individuos en cuanto al cumplimiento de sus compromisos financieros, como préstamos y tarjetas de crédito, e incluye aspectos como la puntualidad en los pagos, la gestión responsable de deudas, la comprensión de términos y condiciones, y la capacidad de planificación financiera.
En el país, la cultura de pago se ha convertido en un valioso activo, caracterizando al colombiano como un “buena paga”. Datos de las centrales de riesgo revelan que 91% de las obligaciones crediticias tienen un historial positivo, mientras que solo 9% enfrenta algún tipo de marca negativa. Esta situación se traduce en que, en promedio, solo 5% de cada $100 prestados por el sector, experimenta morosidad.
De acuerdo con la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia, Asobancaria, los créditos concedidos por instituciones financieras suelen derivar principalmente de los depósitos del público, en lugar de los fondos de los accionistas.
Según Asobancaria, promover una sólida cultura de cumplimiento financiero es fundamental para mantener la confianza de los depositantes, minimizar los riesgos financieros y estabilizar tasas de interés. Y es que las recientes modificaciones normativas fomentan la morosidad y a eso se une que la situación económica actual ha afectado la cultura de pago.
Desafíos como la alta inflación (7,16%) y el desempleo (10,6%) disminuyen la capacidad de pago de los clientes. Además, la reducción de ingresos en las unidades productivas y el aumento de los gastos financieros impactan la viabilidad de los créditos. Estos desafíos se agravan con cambios normativos que alteran el historial crediticio y problemas de comunicación con los clientes, lo que compromete la solidez de la cultura de pago.
“La falta de conciencia sobre los riesgos del sobreendeudamiento y la influencia de mensajes que minimizan las consecuencias del no pago pueden llevar a los consumidores a incurrir en mayores costos y a la exclusión del sistema financiero. Es crucial promover una cultura de pago responsable, en la cual las autoridades económicas, el Gobierno, los legisladores y las entidades financieras trabajen juntos para defender este activo”, explicó el gremio.
Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria, señaló que la cultura de pago es crucial porque reduce el riesgo económico. El sistema financiero gestiona el ahorro y los riesgos, prestando dinero de los hogares a otros agentes, siempre que el riesgo de impago sea bajo. Si la cultura de pago empeora, aumentan las tasas de interés y disminuyen las oportunidades de inversión y consumo, afectando negativamente la economía.
“La cultura de pago en Colombia es alta; no se ha dejado de pagar la deuda pública externa en más de 100 años. Se espera que la cartera vencida, especialmente la de consumo, disminuya en el segundo semestre del año”, indicó Olarte.
Campaña de educación financiera “Pagar sí paga” de Asobancaria
De acuerdo con Jonathan Malagón, presidente de Asobancaria, el sector financiero, está convencido de que pagar es beneficioso. Esto no solo protege los ahorros, sino que también permite continuar accediendo a crédito para realizar sus aspiraciones. “Iniciativas como la campaña de educación ‘Pagar sí paga’ de Asobancaria, busca concienciar a consumidores sobre los efectos de pagar a tiempo sus obligaciones financieras”, indicó el gremio.