Bolsas
Crisis en Ucrania
Canadá busca ante EE.UU. cubrir petróleo de Rusia en vez de que lo haga Venezuela
lunes, 14 de marzo de 2022
El país del norte es uno de los que hoy está en el podio de los territorios con las mayores reservas probadas de petróleo
Mauricio Zuluaga
El cerco comercial que buena parte del mundo viene tejiendo contra Rusia por cuenta de la invasión a Ucrania, no solo ha generado el mayor aumento en el precio del petróleo en más de una década, sino también la búsqueda de recursos energéticos en otros mercados. En ese abanico de opciones, trascendió el acercamiento de Estados Unidos al régimen de Nicolás Maduro para que Venezuela supla parte de esa demanda. Lo que en la práctica supondría el fin de la exclusión y el bloqueo comercial al chavismo.
Ante esta posibilidad, el gobierno de Alberta, provincia canadiense que produce más de 3,5 millones de barriles al día, pidió a Estados Unidos mirar hacia esta parte del mundo en lugar de hacer tratos con el régimen venezolano. “Somos la solución, no Venezuela”, dijo la ministra de energía Sonya Savage, quien agregó que los barriles de Alberta están justo en la puerta de al lado.
Canadá es el tercer país con las mayores reservas petroleras y el cuarto mayor productor de crudo. De ahí que, tras la prohibición emitida por el gobierno de Joe Biden frente al suministro de fuentes energéticas rusas, lo más viable sería que Alberta cubriera los cerca de 600.000 barriles de petróleo ruso que a diario llegaron a Estados Unidos en el 2021.
Y es que el acercamiento de la Casa Blanca a Caracas, además de suponer un golpe para la oposición venezolana, también podría echar por la borda el esfuerzo realizado por las naciones que han clamado y trabajado en pro del retorno de la democracia a Venezuela. En ese frente Canadá ha venido jugando un papel importante, siendo el primer país del G7 en reconocer a Juan Guaidó como presidente legítimo, albergando la reunión del grupo de Lima en 2019, y la cumbre de países donantes el año pasado. Por esta razón, el llamado desde Alberta no solo tiene un tono comercial sino político.
En lo que tiene que ver con el bloqueo al Kremlin Canadá se ha movido rápidamente. El primer ministro Justin Trudeau fue uno de los primeros líderes en vetar las importaciones de petróleo desde Rusia, medida que fue acompañada por aranceles del 35% a otros productos provenientes de ese país, una medida que fue respaldada por el sector productivo. “Es tiempo de reemplazar las importaciones de gas de cualquier régimen autoritario por energías canadienses”, señaló el presidente de la Cámara de Comercio de Canadá, Perrin Beatty.
Paradójicamente, hace un año, cuando apenas tomaba posesión en la Casa Blanca, el presidente Biden suspendió la construcción del oleoducto Keystone XL, que permitiría transportar casi un millón de barriles de crudo diarios desde Alberta hasta la costa del Golfo de Texas, en los Estados Unidos. La necesidad de reemplazar a Rusia de la ecuación podría revivir el proyecto, al menos así lo espera el sector de hidrocarburos canadiense.
Otros países, mucho más alejados, ya comenzaron a mirar hacia Canadá. Letonia quiere reducir la dependencia de Rusia, por lo que su embajador en Ottawa señaló que se está trabajando en una propuesta para construir una terminal de importación de gas natural licuado cerca del puerto de Skulte, en el mar Báltico, y se alentaría a los inversionistas canadienses a participar en él.
El éxodo ucraniano en Canadá
La mayor diáspora ucraniana, después de Rusia, está en Canadá. Este país es la casa de más de 1.4 millones de personas nacidas en esa parte del mundo o con ascendencia ucraniana. Dentro de este grupo figuran personalidades de la vida política, entre ellos, la viceprimera ministra de Canadá, Chrystia Freeland, quien además lidera la cartera de finanzas. Dicho vínculo ha hecho que este país, a pesar de la distancia geográfica, esté priorizando la atención a refugiados y las sanciones al Kremlin.
Al tiempo que Canadá se convirtió en el primer país en eliminar a Rusia y Bielorrusia como socios comerciales dentro de la Organización Mundial del Comercio, dándoles el mismo estatus que tiene Corea del Norte, el gobierno federal anunció dos nuevos programas para refugiados y aumentó la ayuda militar a Ucrania.
De enero a hoy Canadá ha recibido a 6.265 ucranianos. “Una de las primeras cosas que escuchamos de la comunidad ucraniano-canadiense es que la gran mayoría de las personas que quieren venir a Canadá no quieren quedarse", dijo el ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, Sean Fraser.
Las Naciones Unidas estima que a la fecha más de 1,7 millones de personas han huido de Ucrania a los países vecinos. La ruta abierta por el gobierno canadiense les permitirá a los refugiados de esta nacionalidad acceder a permisos de trabajo y estudio, mientras que quienes tienen familiares en este país podrían obtener la residencia permanente.