El futuro del sector hidroenergético colombiano ¿Dónde poner el foco de inversión?

Aunque el país dispone de un gran potencial de generación hidroeléctrica, pues cubre 70% de la electricidad que se consume en nuestro territorio, según datos del Ministerio de Minas y Energía, los retos que el sector afrontará en los años venideros serán enormes, explicaron expertos consultados y eso coincide con el plan de la transición energética que propuso el Gobierno desde el inicio.

Natalia Gutiérrez, presidenta de Acolgen, mencionó que hay varios desafíos por superar en el sector. El primero y primordial a superar es que se debe entender la importancia de construir proyectos hidráulicos con embalses nuevos, dado que las proyecciones de agencias internacionales como Irena, el IEA y el IHA demuestran que lograr la carbono neutralidad solo es posible con una expansión de este tipo de infraestructura.

“Las comunidades, los políticos, el Gobierno y toda la población deben comprender la importancia que tienen las hidroeléctricas para el país y lo que éstas han representado para que contemos con energía disponible todo el día, a toda hora. Colombia es un país que no puede renunciar a un recurso que tiene de manera abundante”, indicó Gutiérrez.

La presidente de Acolgen explicó que más que verlo como solo un reto, hay que “conscientes y respetuosos de estos temas”. Y agregó que existe una preocupación por la propuesta del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de regular el manejo del caudal ambiental, “lo cual podría hacer inviable el sector eléctrico, acabando con más de 50% de la energía firme, de ser aplicada la propuesta que conocemos”.

Carlos Orduz, vicepresidente de Generación Energía del Grupo EPM, expuso que el reto más importante que tiene el sector es mantener la actual infraestructura que tienen las diferentes empresas en condiciones de operación y de mantenimiento, y poder ofrecer una energía limpia, renovable y al mejor precio.

El funcionario agregó que se debe aprovechar el potencial de generación hidráulica con la cual contamos, pero se requiere diversificar la canasta que ampliar sus posibilidades, para lo cual sugirió difundir las ventajas de los efectos de embalsar un río en la cadena de suministro energético.

“Claramente, hay que hacer intervenciones, pero también se deben conocer las ventajas económicas de construir represas, los beneficios ambientales y la capacidad de generar hidrógeno en el futuro. Colombia tiene las fuentes y las montañas que no poseen otros países, y eso hay que aprovecharlo”, indicó Orduz.

Por último, el vicepresidente de EPM reclamó que el sector requiere más claridades regulatorias que permitan seguir incrementando su potencial, dadas sus ventajas sostenibles, en cuanto a que no tienen limitaciones horarias, como las pueden tener otras energías renovables como la solar o la eólica, y que el país la siga priorizando dentro de su matriz.

La mirada de la academia

El doctor en ingeniería eléctrica y docente de la Pontificia Universidad Javeriana, Luis Gabriel Marín, remarcó que el principal reto que tiene el sector hidroenergético colombiano (y en general de todo el sector energético en sí) es el de la diversificación de su matriz, pues cuando se suministra 70% de la energía que consume el país, es importante tener diversas posibilidades en caso de que se presenten fenómenos climáticos que afecten la disponibilidad del recurso hídrico. “Es importante que todas las tecnologías convivan entre sí y se cooperen, porque si llega un fenómeno climático y hace que se disminuyan los niveles de los embalses, se necesitarán otras fuentes para suplir esas necesidades y abastecer las demandas en determinados momentos”, explicó Marín.