Justicia

De la revolución de Hugo Chávez a la del tráfico de cocaína y el cartel de los soles

Según reportes de inteligencia, la economía criminal binacional se ha visto facilitada por una frontera porosa y la crisis social

Alejandra Rico Muñoz

En 2021, el Ministerio del Interior de Venezuela emitió una declaración sobre una operación antinarcóticos en el estado de Zulia: el Ejército había destruido ocho laboratorios de cocaína, y en la operación los militares incautaron casi media tonelada de coca. Además, erradicaron 32 hectáreas de cultivos de coca y destruyeron más de 300.000 plantas, según un informe de InSigtht Crime.

Al otro lado de la frontera, en el Catatumbo, en la frontera con el Zulia, 32 hectáreas no son más que un cultivo de coca de tamaño mediano. Pero esa no es toda la coca que existe en Venezuela, explica la misma fuente. De hecho, está comprobada la presencia de cantidades significativas de coca en al menos tres municipios de Zulia y dos más al sur, en el estado Apure.

Aunque hasta ahora la producción de coca en Venezuela es incipiente, la región fronteriza -pobre, aislada, abandonada por el Estado y dominada por las guerrillas colombianas y la delincuencia-, es ideal para la consolidación del negocio, en un país “ahogado en una crisis económica, gobernado por un régimen corrupto y devastado por la criminalidad”, según InsightCrime.

De acuerdo con reportes de inteligencia citados por el medio, la economía criminal binacional se ha visto facilitada por una frontera porosa que permite que tanto los bienes ilegales como las personas se muevan con libertad entre los dos países y ante la indiferencia de la Guardia Nacional, cuando no la complicidad, ya que siempre se ha hablado de la existencia de un cartel de los soles.

Hoy, el gobierno estadounidense estima que anualmente se trafican por Venezuela unas 250 toneladas de cocaína, que representan entre 10% y el 15% de la producción global estimada.

TEMAS


Nicolás Maduro - Crisis Venezuela