Hacienda
El impulso económico de Santander
Santander, ¿qué hay pa’ asar?
miércoles, 16 de julio de 2025
José Luis Vega
Llevo más de 18 años prendiendo brasas, sirviendo sabores y creyendo en lo nuestro. Como maestro de la parrilla y creador del Club del Asado Colombia, he recorrido buena parte del país -y algunas ciudades del mundo- llevando con orgullo las banderas de Santander y de nuestra cocina. Y cada vez que me preguntan de dónde soy, lo digo con firmeza. Porque donde llego, la gente reconoce la generosidad de nuestra tierra, se encanta con lo que cocinamos… y con lo que somos.
Hoy el turismo vive un gran momento. La gente ya no viaja solo para ver: también viaja para probar, para conectarse con las raíces y con las historias que hay detrás de cada plato. Y en ese panorama, Santander está llamado a ser protagonista. No solo por sus paisajes, sino por lo que se siente al estar aquí: hospitalidad, carácter… y comida rica.
Un lugar que lo resume todo es la represa de Topocoro, esa joya escondida en el corazón del departamento que cada vez atrae más miradas. Yo mismo lo viví: subí a una balsa, armé una parrilla y me puse a asar para los visitantes. Y fue abrumador ver cómo los turistas se acercaban, curiosos, felices de probar carne santandereana en medio de ese escenario acuático. Fue una de las experiencias más auténticas y emocionantes que he vivido como cocinero.
¿Y nosotros, los empresarios? Tenemos que movernos. Innovar, buscar alternativas, atrevernos a nuevas apuestas y aprender de los errores. Este no es tiempo de quedarse quieto ni de trabajar aislados. Es momento de sumar fuerzas, construir redes, compartir ideas y hacer que lo bueno que pasa en Santander se multiplique.
Con el Club del Asado hemos comprobado que, cuando se hace bien, la gente responde. La cocina a la parrilla, que parecía cosa de pocos, hoy es una pasión compartida, una herramienta para mostrar lo mejor de nuestra tierra.
Pero si queremos crecer en serio, debemos prepararnos. Es clave capacitar al personal, contar con mano de obra calificada y saber vender la experiencia completa. Porque no solo servimos comida: servimos identidad, orgullo y cultura. Y en eso, Santander tiene con qué. Somos el departamento que más carne consume en Colombia, tenemos una producción agrícola diversa y una geografía bendita: de los fríos de Tona a los calores intensos de Barrancabermeja, aquí se da de todo… y con sabor.
La invitación es a seguir preguntándonos: ¿qué hay pa’ asar?
Porque sí, en Santander hay mucho pa’ asar, pa’ mostrar y pa’ construir. Y la mejor forma de hacerlo es creyendo en lo nuestro y contando nuestras historias con orgullo.