Los bloqueos y el vandalismo han acabado con más de 300.000 empleos

El pasado 28 de abril, el país vivió la primera de una serie de movilizaciones enmarcadas en el paro nacional convocado por diversos sectores. La reforma tributaria planteada por el Gobierno generó una respuesta social inmediata. Como contrarrespuesta, el Gobierno la retiró el 2 de mayo, pero esto no calmó los ánimos. Otra serie de peticiones se sumaron a las iniciales, que iban más allá de la reforma inicial.

Si bien el Gobierno y el Comité del Paro se han sentado a negociar, no han dado frutos concretos los encuentros. La protesta se ha visto fuertemente representada en especial en el suroccidente del país, donde la violencia y los bloqueos han sido protagonistas. Estos cierres han generado una serie de consecuencia en el empresariado que ha pedido que se levanten.

De acuerdo con Fenalco, desde el inicio de las manifestaciones se han generado pérdidas por $3 billones al comercio formal, y los empleos perdidos son más de 300.000 por cuenta del cierre de 40.000 empresas. El gremio de comerciantes hace un especial énfasis en Cali, donde la Cámara de Comercio de Cali estima que por saqueos, vandalismo y lo que se ha dejado de percibir, la cifra de pérdidas ascendería a $2,5 billones.

Según una encuesta de Fenalco Valle, 95,6% de las empresas han mostrado una disminución en ventas y 84,4% de los establecimientos han cerrado total o parcialmente por problemas de movilidad.

Cabe resaltar que en el Valle se encuentran grandes empresas debido a sus zonas industriales, así como por el Puerto de Buenaventura, donde se calcula que se han represado hasta 270.000 toneladas de carga.

Esta situación ha llevado a que importantes empresas anunciaran un cierre temporal o el despido de sus empleados.

El caso más reciente es el de Aldor, empresa productora de golosinas, que comunicó que detendría su operación debido al desabastecimiento y a la imposibilidad de despachar a los mercados.

Leonardo Aljure, CEO de Aldor, dijo que se han dejado de producir unas 3.000 toneladas de confitería. Destacó que hay un desabastecimiento de azúcar, uno de los insumos esenciales de su operación.

Precisamente, Asocaña y sus ingenios se encuentran cerrados por la coyuntura, agudizando la situación de desabastecimiento. De acuerdo con el gremio, los bloqueos en las vías son la razón que ha motivado su cierre. Por esto, advirtieron que se encuentran en riesgo 286.000 empleos, entre los directos e indirectos que generan.

Otras empresas del agro que han visto afectaciones importantes son las productoras de huevos. “Dependemos del transporte, de la llegada de los insumos para alimentar nuestras aves y obviamente de sacar los huevos para llevarlos a nuestros centros de clasificación y poder repartirlos. La situación es dramática, ya las aves están entrando en deterioro e, incluso, están muriendo”, señaló Carlos Lozano, gerente general de Santa Reyes.

Por su parte, Juan Felipe Montoya, presidente de Huevos Kikes, afirmó que la situación ya los llevó a sacrificar cerca de 40.000 aves. Según Fenavi, el gremio de avicultores, el total de sacrificios asciende a 12 millones de animales.

Otro gremio fuertemente afectado por le paro es el de la construcción, en el que, de acuerdo con Camacol Valle, están en riesgo 80.000 empleos, puesto que 96% de las obras se encuentran detenidas. A nivel nacional, esa cifra podría llegar a 472.000 puestos de trabajo.

Francisco Martínez, gerente de Arquitectura y Concreto, explicó que uno de los mayores problemas que ha enfrentado el sector es la falta de suministros, y que los bloqueos que dificultan la llegada de los trabajadores.

Cerrejón, la empresa carbonífera, también manifestó que por cuenta de los bloqueos a las vías férreas han debido cerrar su operación. No pueden transportar el carbón ni ingresar insumos necesarios. Esto llevó a la compañía a cerrar de manera forzada y a suspender temporalmente contratos laborales.

“Confiamos en que, con ayuda de las autoridades, podamos superar esta situación en el menor tiempo posible. El bloqueo lo está llevando a cabo un grupo de extrabajadores, que salió de la compañía”, expresó su presidente, Claudia Bejarano.

Gilpa Impresores Zona Franca S.A. también se vio forzada a cancelar los contratos de sus trabajadores por las dificultades de movilidad que ha generado el paro. Integral de Empaques fue otra compañía llevada a cerrar por estas dificultades.

Ecopetrol informó tener problemas en su operación en los segmentos de producción, transporte, refinación y comercialización. Esto llevó a que el crudo transportado en el mes cayera a 716.000 barriles diarios.

Si bien estos son ejemplos de grandes empresas detenidas, cabe recordar que se estima que más de 40.000 empresas han cerrado, y las micro, pequeñas y medianas serían las más afectadas, ya que son 90% del sector productivo según el Dane.