Hacienda
Elecciones en Estados Unidos 2020
Desempleo será uno de los retos que tendrá el nuevo Presidente de EE.UU.
miércoles, 4 de noviembre de 2020
La economía de EE.UU. en los últimos cuatro años, bajo el liderazgo de Donald Trump, había conseguido buenos resultados hasta que llegó la pandemia y creó una crisis de empleo
El presidente 46 de la potencia económica mundial no solo deberá afrontar uno de los acontecimiento históricos más importantes del momento, como lo es la pandemia, sino que además deberá recuperar una economía golpeada en varios aspectos como el desempleo, el Producto Interno Bruto (PIB), la migración y también temas de conflictos raciales.
El actual presidente de EE.UU., Donald Trump, recibió una nación en 2017 con un PIB que avanzó 2,3% que venía del mandato del expresidente Barack Obama. En su segundo año al mando, según reportó la Oficina de Análisis Económico de Estados Unidos, el crecimiento de la economía llegó hasta 3% y 2,2% en 2019.
Con un PIB positivo, la economía estadounidense se movía en tasas de desempleo de 4,9% en enero de 2016 a 3,5% en marzo de este año, siendo su dato más bajo en cuatro años, lo que para los analistas eran cifras muy positivas para un país con una fuerza laboral de más de 156.000 millones.
En el tema inflacionario, la situación también era positiva en el mandato de Trump las cifras muestran tasas no superaron 3% anual (julio de 2018) y para julio de este año el Índice de Precios al Consumidor estaba en 1% lo que es considerado como positivo para los ciudadanos.
Uno de los puntos polémicos fue el comercio internacional, sin embargo la balanza se mantenía deficitaria en los últimos tres años, pero con crecimientos marginales lo que dejaba una puerta al optimismo.
Pero, la pandemia golpeó la puerta y evidenció mes a mes una recaída en la economía. El indicador más golpeado ha sido el empleo, según el más reciente reporte del Departamento de Trabajo de Estados Unidos “los empleadores estadounidenses agregaron 1,4 millones de empleos en agosto y la tasa de desempleo cayó a 8,4%. La tasa de desempleo ha disminuido desde un máximo cercano a 15% en abril, lo que indica que los estadounidenses están volviendo al trabajo”.
Una tasa de 15% que no se veía desde la Gran Depresión y que hacía que la economía estadounidense enfrentara un gran problema que sigue latente y las expectativas están sujetas a lo que ocurra con el contagio del covid-19 y su vacuna.
Luis García, docente de economía de la Universidad Javeriana, explicó que con la llegada de la pandemia el análisis económico cambió. “En tiempos normales cuando la economía no va bien es porque los consumidores no quieren consumir o los inversionistas bajan su inversión. Cuando esto sucede la fórmula es más o menos conocida y es volver a generar esa demanda, bajar la tasa de interés y el Gobierno gasta más. En esta situación el problema es distinto porque no es que la gente no quiera consumir, sino que no puede trabajar; si la gente no puede trabajar, no hay producción. En este momento, ya se han hecho muchas de las medidas dirigidas al consumo como subsidios a todas las familias”.
En lo que respecta al PIB, el WSJ indicó en uno de los análisis económicos que “la economía creció a un ritmo récord en el tercer trimestre, aumentando 7,4% con respecto al trimestre anterior y a una tasa anual del 33,1%, recuperando alrededor de dos tercios del terreno que perdió antes en la pandemia del covid-19”.
Los expertos afirman que si la vacuna no llega el próximo año, los retos serán aún mayores. La guerra comercial es otro de los puntos álgidos que dejaría el mandato Trump en caso de no tener una reelección.
Andrés Rodríguez, docente de la Universidad El Bosque, manifestó que uno de los desaciertos de Trump frente a la economía fue “las firmas de ciertas alianzas que generaron gran controversia con la comunidad internacional” y que cerraron puertas. Así, el nuevo presidente tendrá el reto de mejorar las cifras de empleo, limar asperezas en comercio y hacer que las fábricas vuelvan a producir.
Apuestas de comercio exterior cambiarían con elección del presidente
No solo el partido político al que pertenece cada candidato es lo que los diferencia, también sus propuestas que se han venido presentando a lo largo de este año. El comercio exterior es uno de los enfoques más diferenciados entre Trump y Biden. Mientras Trump apuesta por un comercio proteccionista y mantiene la posibilidad de “desvincular” la economía de Estados Unidos con la de China; el candidato Biden apuesta por una apertura de las fronteras comerciales, lo que lleva a pensar si la guerra comercial llegaría a su fin.