Hacienda
Encuesta Empresarial 2014-I
Quedan deudas con la protección ambiental y la equidad social
martes, 15 de julio de 2014
Es importante indicar, que durante la administración de Santos, se decidió adicionalmente cerrar la ventanilla para presentación de solicitudes de títulos mineros.
Luis Ferney Moreno
El tratamiento que se le ha dado a la locomotora del sector minero dentro de la economía y las políticas públicas, inició en el Gobierno de Álvaro Uribe, periodo durante el cual se promulgó la Ley 1382 de 2010, la cual reforma el código de minas de 2001 . A partir de la promulgación de dicha ley, se tomaron ciertas determinaciones que buscaban moldear las decisiones sobre el recurso minero, teniendo en cuenta una experiencia adquirida en las reformas aplicadas al sector petrolero. Temas trascendentales como la extensión de plazos en la legalización minera, la reducción de prórrogas, la inclusión de páramos y humedales en las zonas restringidas para la minería, así como la clasificación de los tipos de minería, fueron parte de la mencionada reforma.
Sin embargo, es a partir del Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, denominado “Prosperidad para todos” (2010-2014), que se denominó como locomotora de la prosperidad al impulso del sector minero-energético, nombre que compartió con otros sectores . Su denominación como locomotora obedeció a que dichos sectores establecerían el crecimiento del país en múltiples indicadores económicos, sociales, ambientales, etc.
La estructura de la locomotora del sector minero energético basaba su proyección en la aplicación de políticas públicas y la creación de leyes, las cuales estimularían tanto la inversión nacional como la extranjera, consolidarían el desarrollo de clusters de bienes y servicios apalancados en el sector minero, y aun más importante, entregarían herramientas idóneas para enfrentar nuevos retos propios del crecimiento minero proyectado.
Algunos de estos importantes desafíos fueron: el buen uso y gestión de los recursos, la interrelación de los actores del sector, la protección ambiental y el alivio de los efectos económicos negativos posibles como: la inflación, la revaluación y los cambios bruscos en los precios. Para esto el Gobierno entre otras cosas, creó el viceministerio de Minas junto con dos Direcciones de Minas y estableció un nuevo sistema de regalías,
Es importante indicar, que durante la administración de Santos, se decidió adicionalmente cerrar la ventanilla para presentación de solicitudes de títulos mineros, debido a la gran cantidad peticiones en trámite, que alcanzaron la cifra a nivel nacional de más de 19.000 solicitudes de concesiones mineras represadas . La ventanilla literalmente fue clausurada desde el 2011 hasta mediados de 2013, esta decisión tuvo como finalidad otorgar un tiempo para la organización institucional de las autoridades del sector, el descongestionamiento de las respuestas e impulsar el programa de legalización de la minería tradicional.
Al reactivarse, la (ANM) se manifestó que de todas las solicitudes solo 6% resultaron en la obtención del título minero.
Los resultados de todas las medidas fueron efectivas, ya que se avanzó en volumen y en el valor de la producción de los diferentes bienes primarios incluyendo la minería, particularmente se nota este adelanto en la influencia positiva sobre el PIB nacional .
Se puede decir que en términos macroeconómicos y de promoción de la inversión extranjera, la estrategia fue bien elaborada y rindió sus frutos, pero en los temas protección ambiental, equidad social y el mejoramiento del nivel de vida de los colombianos, todavía hay un largo camino por recorrer y por lo tanto hay un reto para el segundo periodo , en donde se deberá cumplir con estos objetivos no alcanzados sin afectar el crecimiento económico, todo lo anterior enmarcado dentro de un proceso de paz. Hay un escenario que viene cambiando para el sector minero en Colombia, sobre el cual varios de los aspirantes a desarrollar esta actividad han desistido de la misma, bien porque la autoridad minera no les otorgó un título minero que esperaban, o debido al cambio de la regulación sobre el sector dirigida al aumento de las cargas ambientales y sociales. Otro punto a tener en cuenta dentro de estos próximos cuatro años, es el de que posiblemente nos estemos enfrentando al declive de los precios altos en minería. En el caso colombiano, para 2013 existió una caída en cuanto a la participación de la minería en el (PIB) pasando de 2,3 en el 2012 a 2.0 el año pasado .
El reto es grande y pasa por el tema social, ambiental, de formalización, distribución de regalías y desarrollo de infraestructura.
Santos en su segundo mandato debe lograr el desarrollo sostenible del sector minero integrando las diferentes políticas ambientales y estrategias de desarrollo, para garantizar satisfacer las necesidades de los colombianos equilibrando los intereses de desarrollo social, progreso económico y protección ambiental.