Luego de la bonanza, productores palmeros apuestan a subir ventas siendo sostenibles

De la mano con el buen momento de la palma de aceite en Colombia, está el éxito empresarial. Durante 2022, el país experimentó un incremento de 7% en la producción de aceite de palma, para un total de 1,7 millones de toneladas.

Amparados en la madurez de sus cultivos y en un fenómeno de La Niña que terminó por fortalecer al sector, productores, empresas de fertilizantes y exportadores han sumado esfuerzos para seguir con la buena racha, que en Colombia se ha visto reflejada en la generación de empleo y en la productividad de la tierra.

Yara, Cargill y Monómeros son algunas de las empresas con apuesta directa al sector palmicultor colombiano. En el presente y futuro, empresarios aseguran que el paso a seguir es la sostenibilidad, por lo que se han movido hacia los procesos de deforestación y certificaciones ambientales, pues grandes mercados internacionales, como el europeo, cada vez son más exigentes con estos requisitos.

Fedepalma, por su parte, aseguró que el objetivo para este año es llegar a 440 palmicultores certificados en estándar Apco para 2023, cuya finalidad es la reducción de emisiones de gases efecto invernadero, a lo largo del proceso productivo

“Nuestro compromiso es incluir más a las comunidades y, por ejemplo, a víctimas del conflicto. La idea es que las personas sean operadores de sus propios servicios, con asistencia técnica a largo plazo. También, la garantía de la compra del fruto a valores del mercado”, indicó el CEO de Poligrow Colombia, Carlo Vigna Taglianti.

Daabon y la sostenibilidad de su planta Tequendama

Si hablamos de sostenibilidad, el Grupo Daabon, cuyo presidente es Manuel Julián Dávila Abondano, ha consolidado la biorrefinería sostenible de palma Tequendama, que integra tecnologías de conversión de biomasa y procesos para la producción simultánea de combustibles limpios, energía renovable y nuevos productos a partir de biomasa, impulsando así un modelo de desarrollo económico verde. Esta planta cuenta con estándares internacionales para la producción de aceite de palma sostenible.

"El pasado fue un buen año porque hubo un buen régimen de lluvia con buena producción y el mercado acompañó con buenos precios, así que el sector, tanto Daabon como los palmeros, tuvieron un buen año. En este año, 2023, los precios han bajado significativamente y las producciones han seguido bien; sin embargo, con el anuncio de El Niño, se teme que baje la producción y vamos a tener, seguramente al final del año, baja producción y los precios no serán como la bonanza del año anterior", indicó Manuel Julián Dávila Abondano, presidente del Grupo Daabon.

Yara, entre las empresas que le apuestan al sector

El director de Desarrollo de Negocios de Yara, Miguel Amado, indicó que sus estrategias se centran en abastecer al agricultor palmero con productos y herramientas que minimizan el impacto en el medio ambiente y maximizan la productividad. “Yara ofrece una solución de fertilización basada en productos con bajo impacto ambiental. Desde su fabricación, generan menos emisiones de gases de efecto invernadero, lo que contribuye a la reducción de la huella de carbono en toda la cadena de suministro”, explicó el directivo.

Poligrow consolida su crecimiento en Mapiripán

La empresa radicada en Mapirpán, Poligrow Colombia, tuvo un crecimiento de 70% respecto a 2021 y se ha consolidado como una de las más vendedoras del sector. Según su CEO, Carlo Vigna, en 2022 registraron una utilidad de $120.000 millones. “Es un crecimiento importante luego de los $75.000 millones registrados el año anterior”, dijo el directivo. Para 2023, prevén seguir creciendo apalancados en la madurez del cultivo y en los procesos de optimización de costos energéticos que iniciaron el año pasado.

Palmas del Cesar ha invertido en las condiciones de sus colaboradores

Una de las empresas que ha ratificado su buen momento es Palmas del Cesar, que atiende un área de cultivo de cerca de 14.000 hectáreas. El área de influencia de sus proyectos de desarrollo social abarca siete municipios en el Cesar, Santander y Norte de Santander. “El sector palmero viene pasando por un muy buen momento. Hemos aprovechado recursos para desatrasar proyectos con el objetivo de mejorar las condiciones de nuestros colaboradores y en sostenibilidad”, dijo Fabio González, gerente de la empresa.

Riopaila Castilla produco 9.874 toneladas de aceite crudo de palma

La división palmera de Riopaila Castilla, empresa cuyo presidente ejecutivo es Pedro Cardona López, registró un crecimiento en cuanto a producción y comercialización de 33,5% el año pasado en el Vichada. En 2022, la planta produjo 9.874 toneladas de aceite crudo de palma, manteniendo una extracción promedio de 23,30%, superando los indicadores a nivel regional. Asimismo, el indicador de extracción disminuyó en un 0,5% con respecto al año 2021, debido a condiciones climáticas.