Las actividades del sector turístico, uno de los motores de la economía del Caribe

El sector turístico fue uno de los más golpeados durante la pandemia en la medida en que la gente no pudo viajar y cuando se empezó a dar libertad de hacerlo, al principio fue con muchas restricciones.

Sin embargo, la región Caribe ha sido una de las más dinámicas en la recuperación de visitantes ya que gracias a sus atractivos de sol, playa y demás servicios la gente ha querido regresar a dichos destinos.

Según cifras de Anato, al cierre del primer semestre del año 3,9 millones de personas visitaron Barranquilla, Cartagena, Santa Marta, Valledupar, Riohacha y Montería, lo cual representó un aumento de 92% respecto al mismo periodo de 2021 y de 31% frente al primer semestre de 2019, antes de la pandemia.

En el IV Encuentro de la Cadena Turística del Caribe Colombiano, organizado por Cotelco Magdalena, con apoyo del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y Fontur, se reveló que en Semana Santa el nivel de ocupación de camas fue superior a 85% y en algunas ciudades, como Santa Marta, llegó a 100%.

“Santa Marta fue piloto para la reactivación del turismo colombiano con acciones, inversiones y medidas oportunas. Avanzamos para mitigar el impacto generando valor en productos y servicios”, dijo la alcaldesa de Santa Marta, Virna Lizi Johnson.

Estadísticas de Expedia Group muestran que en Barranquilla cerca de 60% de los turistas de negocios del mundo decide extender su estadía para realizar actividades recreativas, lo cual ha impulsado a la Cámara de Comercio a fortalecer el clúster de Turismo Bleisure (negocios + ocio) mediante la inclusión de nuevos modelos adaptables y flexibles al mercado de hoy.

El presidente de Anato capítulo Caribe, Carlos Portilla López, señaló que en medio de todos los efectos negativos que deja la pandemia, una vez se fueron levantando las medidas de manera gradual, los destinos abiertos como las playas y los parques naturales tuvieron mucha demanda. “Cuando la gente empezó a salir después de la cuarentena quería sitios al aire libre. Y ahí, Santa Marta y su Parque Tayrona son un destino clave”, indicó.

Es así como se trabaja de manera articulada para diseñar rutas que unan toda la oferta turística de los cuatro departamentos (Atlántico, Magdalena, La Guajira y Cesar), de tal manera que los turistas puedan recorrer la Costa viviendo la experiencia de rutas gastronómicas, deportes náuticos y conocer la riqueza cultural y recorrer los centros históricos de ciudades como Valledupar.

Igualmente, Cotelco región Caribe elaboró una propuesta colectiva, con las líneas estratégicas necesarias para impulsar el desarrollo turístico en los próximos cuatro años, que en su momento se entregó al hoy presidente Gustavo Petro.

La priorización de las problemáticas identificadas, se dividen en tres grupos: de urgente prioridad, alta prioridad y moderada. De urgente prioridad son la inseguridad, conectividad, control ambiental, inversión, promoción y servicios. En alta prioridad se incluyó planificación, infraestructura, política sectorial, oportunidades, informalidad y playas.

Y en la moderada confluyen las necesidades de mediano plazo, a saber: tecnología e innovación, integración regional, bilingüismo, control abuso al turista, cultura y artesanías, capacitación, articulación de actores e información.

Barranquilla y Atlántico con campañas memorables

Las temáticas priorizadas dentro del Clúster Turismo que promueve la Cámara de Comercio de Barranquilla son “Barranquilla Memorable” y “Atlántico Memorable”, con el objetivo de consolidar a este sector que reúne a 14.356 empresas, registra ventas por $6,8 billones, y genera 95.422 empleos. Son el primer paso hacia el fortalecimiento de la oferta turística y se fundamenta en la arquitectura y el patrimonio; la moda y el diseño; la cultura popular; las artes; la gastronomía; la música; y la literatura, señaló Manuel Fernández Ariza, presidente ejecutivo de la CCB. Por eso, el mercado objetivo se enfoca en viajeros mayores de 40 años de edad, quienes buscan ser pioneros y descubrir destinos; participan de tertulias sobre arte, diseño y moda; son amantes de la cultura por profesión o por pasión; tienen un interés interdisciplinario y mentalidad abierta; usan las redes sociales desde lugares de culto; se especializan en cazar experiencias memorables; y prefieren los hoteles bajo el formato boutique.