Automotor
Movilidad
Solo 0,5% del parque automotor no contamina
sábado, 26 de febrero de 2022
Juan Felipe Ocampo
¿Es posible tener una movilidad menos contaminante en las ciudades del país? Esta es una de las preguntas que hoy más inquietan al Gobierno Nacional y a los gobiernos locales o municipales. A juzgar por las cifras, Colombia aún está lejos de alcanzar un parque automotor que en su mayoría sea amigable con el planeta.
Según la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), en el país actualmente hay un poco más de 30.400 vehículos no contaminantes: 22.262 híbridos eléctricos, 4.939 eléctricos con batería y 3.272 eléctricos híbridos enchufables. De estos, Bogotá cuenta con 14.873 automotores con estas características; le sigue la región metropolitana de Medellín, con 8.077 unidades; Cali, con 1.365; y Barranquilla, con 393 autos de este tipo.
No obstante, el mayor rezago en esta materia se evidencia al analizar el parque automotor que circula por las vías el cual confirma que, del total de vehículos que están matriculados en todo el territorio nacional, un total de 6.623.458 para ser exactos, solo 30.473 son no contaminantes (0,5%).
Para comenzar a superar esta preocupante brecha, es clave tomar como punto de partida tres apuestas que le permitirán al país contar con una movilidad más limpia, sostenible y menos contaminante, por lo menos en el mediano plazo.
Primero, las ciudades y municipios deben generar un mayor entorno cultural y educativo alrededor de esta temática.
Segundo, se debe invertir más en infraestructura para el transporte público con flotas de transporte cómodas, con acceso a personas en estado de discapacidad y con una amplia cobertura. Asimismo, es clave mejorar la carga vehicular, con una red que permita romper la más conocida “ansiedad de rango” o miedo de quedarse sin carga a mitad de camino en un viaje. Igualmente, es indispensable complementar la movilidad eléctrica de cuatro ruedas con una movilidad liviana, incentivando la caminata, el uso de patinetas y la bicicleta.
Y tercero, las ciudades deben continuar con los incentivos para la movilidad eléctrica teniendo en cuenta zonas de parqueo exclusivas para vehículos de este tipo y exenciones de impuestos, de pico y placa y de pago de semaforización. En este punto, vale la pena hacer un llamado de atención sobre el actual y polémico recién aprobado Plan de Ordenamiento Territorial (POT) de Bogotá, el cual podría quitar el beneficio de excepción de pico y placa a los vehículos eléctricos el próximo año. ¡Preocupante!
Hoy, Colombia enfrenta una emergencia ambiental consecuencia de unos medios de transporte contaminantes. Casos como el de Medellín y algunas localidades en Bogotá, que cuentan con altos niveles de contaminación en el aire, confirman que las ciudades para evitar un total colapso, si o si, deberán aplicar mayores medidas coercitivas para generar cambios urgentes y acciones liberales para causar cambios a largo plazo.
Esto será clave para preservar la vida de las personas y generar buenos hábitos de movilidad en el futuro. Es hora de aplicar medidas radicales, no hay más tiempo ni un segundo planeta.