Futuro de las compañías del GEA con miembros independientes en juntas directivas

Gradualmente, la batalla por el poder al interior del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) ha migrado del mercado público al gobierno corporativo de las principales empresas que conforman dicho consorcio paisa. Muestra de ello es que a lo largo de las últimas dos semanas renunciaron a las juntas directivas de las diferentes empresas Jorge Mario Velásquez, presidente de Argos; Alejandro Piedrahíta, vicepresidente de Finanzas Corporativas de la misma empresa; Gonzalo Pérez, presidente de Sura; Carlos Ignacio Gallego, presidente de Nutresa y Juana Francisca Llano, presidente de Suramericana.

Las razones de dichas salidas, que incluso llevaron a Gabriel Gilinski a renunciar al órgano administrador de la multilatina de alimentos, estarían centradas en la necesidad de liberar de conflictos de interés a las tres empresas que hasta el momento han sido objeto de compra. Esto buscaría darle una mayor flexibilidad y poder a cada emisor para responder ante eventuales y futuras OPA a través de la Bolsa de Valores de Colombia (BVC); con miembros independientes que marcarían la hoja de ruta del consorcio.

Diego Palencia, vicepresidente de Investigaciones de Solidus Capital Banca de Inversión, aseguró que el enroque del GEA era conveniente en el pasado porque permitía evolucionar el gobierno corporativo en línea con el crecimiento de los mercados. “Sin embargo, el panorama ha evolucionado mucho y muy rápido, generando la necesidad de ajustar las estructuras de las juntas para enfrentar las OPA”, mencionó.

Si bien estos cambios no implican el desenroque del grupo paisa, si evidencian cambios en la estructura de poder. “Por ahora se ha reformado la fachada del otrora Sindicato Antioqueño pero los cimientos siguen intactos. Esta maratón apenas comienza y se viene una dura pelea entre los dos bloques que hoy dominan a estas sociedades”, añadió Palencia.

Hasta el momento, algunos de los nombres que han reemplazado a estos actores han tenido o mantienen cierta cercanía con el mismo grupo económico o con la otra parte, los Gilinski. En el caso de Sura, cuya compañía eligió su tercera junta del año la semana pasada, destacan Luis Javier Zuluaga, exmiembro del directorio de Nutresa; Pablo Londoño, gerente del Grupo Corbeta (dueños de Alkosto) y Ángela María Tafur, exmiembro de la junta de GNB Sudameris.

Al respecto, Michael Moreno Álvarez, abogado especialista en derecho de empresas, máster en leyes de la Universidad de Virginia y socio en el bufete Paniagua & Tovar Abogados, aseguró que definir y garantizar la autonomía e independencia de los miembros de las juntas directivas de cualquier sociedad, sea el GEA, una multinacional o una compañía familiar, suele ser un proceso subjetivo y que sigue moldeándose.

“Conformar directorios siempre es un reto debido a que, como dueño, siempre se busca que quienes administren el negocio sean personas que sepan del sector y manejen de la manera más idónea el futuro de la compañía, por lo que, usualmente, los que se sientan en el órgano superior son considerados cercanos a los controlantes”, agregó Moreno.

Sin embargo, el especialista destacó herramientas como los estatutos sociales y el reglamento de la misma Junta Directiva como una herramienta de control en donde se tienen en cuenta las calidades de los miembros, qué deben aportar y con base en qué deben tomar decisiones.

Por ahora avanza la oferta de adquisición por Argos, que en su quinto día registró la venta de 935.283 acciones para un total de 979.947, cifra que equivale a 0,45% del máximo a comprar.