Educación
Oportunidades educativas
Los abogados que nuestra sociedad necesita
lunes, 26 de diciembre de 2022
Ingrid Ortiz
En un país en el que a los abogados cada vez más se les confía la dirección de proyectos, de empresas y de entidades por su capacidad para resolver litigios y problemas, se requiere la formación de más y mejores profesionales que se destaquen por su integralidad y que no solo se centren en lo estrictamente legal, sino que estén más en contacto con factores sociales, sociológicos y psicológicos, y cuyas habilidades estén más alineadas con un rol preventivo que favorezca la toma de decisiones más acertadas y asertivas.
Abogados con un criterio profesional formado a partir de unos conocimientos interdisciplinarios y que afronten la diversidad de pensamientos y de opiniones, con una alta capacidad de análisis crítico y de investigación, que les permita llegar a una firma de abogados, a una empresa del sector público y privado o a su propia oficina con una visión amplia y las herramientas necesarias para buscar y construir respuestas.
Las empresas en la actualidad necesitan abogados que tengan conocimientos en distintas áreas y que dominen diversos temas: medio ambiente, ingeniería, administración de empresas, contabilidad, finanzas, entre otros, por lo cual se requiere que reciban una formación teórica y conceptual que vaya acompañada del desarrollo de sus habilidades discursivas, argumentativas e investigativas para ponerlas en práctica en su oficio y transmitir sus ideas de manera clara y oportuna.
Que, además, tengan la capacidad de leer e interpretar estados financieros y planes financieros, de dominar herramientas tecnológicas, de cerrar negocios, de fijar tarifas, de ofrecer una variedad de opciones que hagan que su oficio sea más integral y con un vínculo más estrecho con diversas áreas productivas.
Por otro lado, se requieren abogados tolerantes, pluralistas, que respeten las opiniones de los demás, y que independientemente de sus creencias o visiones, sean capaces de sentarse con otras personas que piensen distinto a ellos y lideren un diálogo en el que sobresalgan los argumentos.
La profesión, hoy y siempre, se ha caracterizado por su función para concertar, y en una sociedad como la nuestra, con tantos conflictos lamentablemente por resolver, el derecho se ha convertido en un eje de prevención para que estos se reduzcan y se logren alcanzar los acuerdos tan necesarios para poder avanzar.
Ese es el reto que instituciones como la Universidad Externado de Colombia nos hemos planteado, brindarle al país abogados formados de acuerdo con las necesidades que tenemos como sociedad, con una integralidad puesta a prueba en cualquier circunstancia y que resuelvan problemas reales y cotidianos como los que vive cualquier ciudadano, al identificarse con ellos y poder encontrar caminos a partir del diálogo y la escucha.