Salud
Reforma a la salud
Lo que pasaría con las Entidades Promotoras de Salud si se aprueba la reforma
miércoles, 29 de marzo de 2023
Las EPS que estén en alto riesgo financiero son las que serían liquidadas, la mayoría de los usuarios de estas entidades pasarían a la Nueva EPS
Como parte de la reforma a la salud que radicó en febrero el presidente de Colombia, Gustavo Petro, junto con la ministra, Carolina Corcho, ante el Congreso, se estipuló la transformación del rol que juegan las Entidades Prestadoras de Salud, la creación Centros de Atención Primaria (CAP) y el traslado de afiliados de las EPS en proceso de liquidación, entre otros aspectos. Sin embargo, en más de un mes que lleva la reforma en el Congreso se han hecho algunos consensos que podrían conllevar al cambio de varios puntos.
Teniendo en cuenta el documento presentado por la ministra de Salud, Carolina Corcho, se crearían Centros de Atención Primaria (CAP), que remplazarían a las EPS que se liquiden. Aunque el Gobierno Nacional enfatizó que el proyecto no busca eliminar a las EPS existentes, por lo que las entidades que estén a paz y salvo con sus acreedores y, no estén en alto riesgo financiero o en proceso de liquidación podrán seguir funcionando.
Sin embargo, las EPS que sí tengan un alto riesgo financiero deberán trasladar sus afiliados a la Nueva EPS o a las Entidades Promotoras de Salud que cuenten con las condiciones necesarias para recibir nuevos usuarios.
De ser aprobada la reforma, las EPS que deberán trasladar sus usuarios son: Famisanar, con 2,2 millones de afiliados; Asmet Salud, con 1,9 millones; Emssanar, con 1,7 millones; Savia Salud, con 1,5 millones; Capital Salud, con 1,08 millones; SOS, con 600.547; Ecoopsos, 345.099; Comfaoriente, con 215.293; Comfachocó, con 166.758; y Capresoca, con 157.843 usuarios.
Según Olga Zuluaga, directora de la Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos (Acesi), dichas EPS “desaparecerán como las otras que se han liquidado y las entidades que cumplen con los indicadores financieros se irán transformando acorde a lo que se establezca en la reforma”.
De esta manera, la Nueva EPS o a las Entidades Promotoras de Salud avaladas por el Gobierno deberán recibir a 11,4 millones de usuarios.
Según indica la reforma, en las zonas donde no queden EPS, “la Nueva EPS asumirá preferentemente el aseguramiento o, en su defecto, lo harán aquellas Entidades Promotoras de Salud con capacidad de asumir la operación en esos territorios”. Además, especifica que la Nueva EPS “contratará los Centros de Atención Primaria Integral Resolutiva en Salud (Capirs), si fuere necesario, o adscribirá la población a ella afiliada en tales centros que estén operando bajo las reglas del nuevo sistema de salud en las subregiones o municipios priorizados en su implementación”.
Recién presentada la reforma ante el Congreso, José Fernando Cardona, presidente de Nueva EPS, dijo que la “evolución para mejorar el sistema es un asunto ético tanto para la EPS como para los accionistas. Estamos en total disposición para aportar en este proceso”.
Otro de los puntos que contempla la reforma es transformar el rol que juegan las Entidades Prestadoras de Salud, pues estas dejarían de manejar los recursos públicos destinados al sector, por lo que se crearía un ‘Fondo Único Público de Salud’, que sería un conjunto de cuentas del Sistema de Salud y sería administrado por la Administradora de Recursos (Adres).
“Que los recursos sean redirigidos al cuidado de la vida en Colombia de manera equitativa en el territorio nacional. Que los recursos públicos sean manejados de manera pública”, dijo Corcho.
Las EPS que quieran ser gestoras, deben estar a paz y salvo con el Estado
Uno de los grandes retos que dejaría la reforma a la salud si se aprueba como está es que las EPS deben estar a paz y salvo con clínicas y hospitales si quieren convertirse en entidades Gestoras de Salud y Vida. Las EPS que están activas tienen una deuda por $16,6 billones. De estas entidades, las que deben más dinero son: Nueva EPS, con $3,4 billones; Salud Total, con $2,3 billones; Sanitas, con $2,1 billones; Sura, con $1,6 billones; y Emssanar, con $1,1 billones. Estas entidades tienen en “vilo a acreedores y prestadores”, dijo Supersalud.