Ambiente
Rumbo al 2030
El modelo cultural y sostenible en Bogotá
sábado, 27 de septiembre de 2025
Luz Angela Castro
Bogotá ha dado un paso histórico. Con Vive Claro Distrito Cultural, la ciudad se convierte en pionera en Latinoamérica al demostrar que la música y la sostenibilidad pueden convivir en un mismo espacio. No se trata únicamente de un recinto para grandes conciertos: es un pulmón verde que late en el corazón de la ciudad y que proyecta a Bogotá hacia el futuro de la cultura global.Los hechos hablan por sí solos. Vive Claro recupera 24 hectáreas en el centro geográfico de Bogotá, de las cuales más de 18 -equivalentes a 75% del espacio total- se destinan a zonas verdes, logrando un balance único entre naturaleza y entretenimiento.
El proyecto contempla la siembra de más de 9.000 árboles, la implementación de 40.000 metros cuadrados de ecopavimento y un sistema de estanques artificiales para la gestión y circularidad del agua. Es un modelo paisajístico que transforma un espacio antes subutilizado en un verdadero ecosistema vivo.El impacto social y económico es igualmente contundente. En sus primeras etapas, Vive Claro generará 22.000 empleos directos, indirectos e inducidos, dinamizando sectores que van desde la construcción hasta el turismo cultural.
Además, aporta al crecimiento del PIB, consolidando a la música en vivo como uno de los pocos renglones que, junto con la agricultura, han mantenido un crecimiento sostenido en la última década en Colombia.En el mundo, la industria del entretenimiento en vivo está acelerando su transformación sostenible. Recintos como The O2 en Londres, Forest National en Bruselas o los proyectos de Live Nation en Canadá avanzan hacia metas de carbono cero, sistemas de energía limpia y modelos circulares.
En este panorama internacional, Vive Claro no solo se pone a la par: se convierte en referente al integrar desde el inicio criterios ambientales, sociales y económicos de gran escala.
El potencial de Bogotá solo puede desatarse con más infraestructura cultural. Las grandes capitales del mundo -Londres, Ciudad de México, São Paulo o Buenos Aires- cuentan con múltiples recintos que conviven y se complementan, permitiendo más giras, más artistas y más experiencias para sus ciudadanos. Un único espacio nunca es suficiente para una metrópoli que aspira a ser global.
Vive Claro responde a esa necesidad con visión y sostenibilidad, poniendo a la ciudad en la ruta de los destinos culturales más importantes del planeta.Este no es un proyecto exclusivo de una empresa: es un legado ciudadano. Un espacio abierto que servirá para conciertos, experiencias culturales, deporte, educación y convivencia. Un punto de encuentro donde Bogotá respira y se proyecta como ciudad global.Vive Claro Distrito Cultural es la prueba de que el país puede soñar en grande y hacerlo con responsabilidad.
Es una invitación a sentir orgullo por una Bogotá que se atreve a liderar y a inspirar al mundo. Porque cuando la ciudad respira a través de Vive Claro, respira también el futuro de nuestra cultura.