Hacienda
Tributaria para dummies
Los mayores recaudos de la tributaria vendrán de los impuestos al consumo
miércoles, 3 de septiembre de 2025
Según las proyecciones de recaudo, se pretende incrementar en $10,8 billones el ingreso por impuestos. Combustibles será otro de los principales aportantes
Tras la radicación de la reforma tributaria, se conocieron más detalles de las pretensiones que tiene el Gobierno en el recaudo de impuestos, pues no son solamente los ajustes que se harán en el IVA, la renta o la retefuente lo que más le impactará a las arcas estatales. Detallando las cuentas presentadas por el Ministerio de Hacienda, se busca financiar al país a través de los gravámenes al consumo, combustibles y los juegos de suerte y azar.
Fue la misma cartera económica la que presentó las estimaciones de recaudo con la tributaria, segmentadas en cuatro títulos: gasto tributario, renta y patrimonio, otros impuestos y medidas Dian, en estas se agrupan cada uno de los tributos que se pretenden implementar con la medida que en el primer año recogerá casi $26,3 billones.
“Más que imponer un ajuste drástico que ponga en riesgo la recuperación económica y comprometa el funcionamiento del Estado, se plantea un esquema transitorio en el que la activación de la cláusula de escape de la Regla Fiscal crea el espacio necesario para financiar el funcionamiento del Estado. Asimismo, motivan el avance de reformas de ingresos y en mejoras de la eficiencia del gasto, orientadas a corregir de manera progresiva los desequilibrios estructurales”, sustentó el Ministerio de Hacienda tras la radicación.
Revisando la proyección de recaudo por impuesto, lo que más le aportará a la tributaria es la categoría de consumo, con $7,8 billones. Aquí mayormente los aportes se harán por IVA, y nuevos tributos como el gravamen al licor y al tabaco. Comparando con la meta propuesta, este segmento estaría aportando casi 30% de la tributaria.
Por ejemplo, solamente con aumentar el IVA de 5% a 19% en el aguardiente y ron, este año se recaudarán $435.800 millones. Si a esto se suma el whisky, u otros licores como brandy, vodka y sus concentrados, entrarán otros $245.800. Es decir, solamente el licor pondrá $681.600 millones.
“Ajustar la estructura del IVA y del impuesto al consumo sobre cervezas, licores, vinos, aperitivos y similares, permitiría reflejar un precio que internalice los costos sociales asociados a su consumo (…) Estas medidas propenden corregir las externalidades negativas, reducir el acceso al alcohol en segmentos donde su consumo genera mayores daños y, simultáneamente, generar recursos fiscales adicionales para financiar políticas públicas compensatorias”, explicó la cartera económica en la exposición de motivos.
Dentro de los nuevos impuestos hay un dato no menor, y es lo referente con el tabaco, pues la medida incrementaría casi 58% tanto los cigarrillos y los vapeadores, con esas medidas se prevé un recaudo de $762.000 millones, por cigarrillos, y $309.000 millones por vapeadores, es decir poco más de $1 billón.
Si se suma el aporte del licor y el tabaco al consumo le aportaría alrededor de $1,7 billones, es decir 22,3% del total.
Para que lo tenga en cuenta, se contemplan gravámenes a servicios como el del procesamiento en nube o software, es decir, si usted usa Google Cloud, iCloud, o similares, tendrá encarecimientos, de hecho, con esa medida se proyecta un recaudo de $435.000 millones.
El segundo rubro clave es el de las medidas orientadas al mejoramiento del recaudo, control y procedimientos del sistema tributario, que en otras palabras busca inyectar recursos a la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, Dian, y mejorar así sus funciones. En las cuentas prevén que eso generará un recaudo de $3,5 billones.
Los combustibles son otro de los puntos sensibles para el bolsillo, pues se le adicionará IVA al productor fósil, al alcohol carburante, incluso al biodiésel. Este segmento pretende aportarle 2,6 billones a la tributaria, pero hay que destacar que muchos de estos impuestos son progresivos, es decir, no aplicará el pleno de la tarifa de inmediato. A eso se suma que también se quitarán ciertas exenciones, lo que hará que en 2027 aumente la cifra a $5,8 billones (poco más del doble), y su recaudo aumente hasta $8,1 billones en 2030.
Sí se excluye el recaudo por impuesto al patrimonio, que sería de $2,2 billones el próximo año, los juegos de suerte y azar son los otros financiadores clave de la tributaria. En general, esta categoría pretende recoger $1,6 billones, que saldrían de ponerle IVA a los juegos o apuestas que se hacen en línea.
“El Ministerio de Hacienda sabe que está entregando una propuesta con la que se cuadra el presupuesto, más o menos sabiendo que no va a prosperar, y a esto lo que va a seguir es una serie de recortes. Lo que se busca más que verdaderamente un escenario de recaudo es mostrar que la responsabilidad política de los recortes que se vendrán es del Congreso, que se proyecta, rechace la reforma tributaria”, señaló Luis Carlos Reyes, exministro y exdirector de la Dian.
Una tributaria progresiva
El Ministerio de Hacienda también presentó la proyección de recaudo, suponiendo que no habrán más tributarias, aunque el promedio es que cada dos años hay una nueva reforma, no obstante prevén que el recaudo aumente a $28,2 billones en 2027, dé el salto a $32,6 billones en 2028, pase a $34,9 billones y alcance $37 billones en 2030. Esto quiere decir que en el próximo lustro se pronostica un repunte de 40,7%.
Al final de la década se prevé que consumo siga siendo el principal financiador, alcanzando un aporte de $9,9 billones en 2030. Los combustibles pasarían a tener el segundo renglón, con un recaudo de $8,1 billones.
A pesar de estos crecimientos, y del aumento en la base gravable, en los cálculos del Gobierno no se prevé un fuerte impacto en materia inflacionaria, y enfatizan que los más afectados serán los estratos socioeconómicos altos.
“La literatura sugiere que aumentos en el IVA solo se traspasan entre 32% y 40% a la inflación del consumidor, por lo que los efectos inflacionarios de las modificaciones podrían ser significativamente inferiores a los estimados”, explican desde el Ministerio de Hacienda.
Cabe destacar que estas medidas se discutirán en el Congreso, por lo que todavía no son vigentes, y pueden ser modificadas o eliminadas.
Bolsillo sí se vería afectado según expertos
Los analistas advierten que si habrá impactos inflacionarios con la reforma, no obstante, aseguran que es necesario para la consolidación fiscal. “Estimamos que, en conjunto, el IVA y el impuesto al consumo podrían afectar al menos 12 % de los artículos de la canasta del IPC. Además, teniendo en cuenta el capital político actual del gobierno, la proximidad de las elecciones legislativas y el número de reformas que estudia el Congreso, reconocemos que la aprobación de la reforma es crucial para la consolidación fiscal” dijo Carolina Monzón, gerente de investigaciones económicas de Itaú.