La industria protege la biodiversidad alrededor de los territorios en los que opera
jueves, 20 de noviembre de 2025
Campetrol y territorio es la campaña con la que se pretende reforzar la importancia de acciones de protección y conservación
Sebastián Aguirre Eastman
La industria del petróleo, gas y energía en Colombia tiene ante sí una oportunidad histórica para redefinir su relación con el territorio. Más allá de la extracción de recursos o la generación de energía, se trata de reconocer que esta opera en uno de los países más biodiversos del planeta y que esa riqueza natural, en vez de ser un obstáculo para el desarrollo, es el activo más valioso que se comparte con las comunidades que acogen los proyectos.
Campetrol y Territorio nace como una respuesta consciente a esta realidad. Esta iniciativa coloca la biodiversidad en el centro de la estrategia operacional, de la industria entendiendo que la sostenibilidad ambiental es la base sobre la cual se construye el futuro del sector.
La biodiversidad como puente de confianza
En cada región donde se opera, la biodiversidad es motivo de orgullo local. Las especies que habitan estos territorios, los ecosistemas que sostienen la vida y los paisajes que definen la identidad cultural de las comunidades son patrimonio compartido.
Cuando la industria reconoce y protege activamente esta riqueza, cumple con una responsabilidad ambiental, pero más importante, construye lazos de confianza genuinos con quienes han sido guardianes históricos de estos espacios.
Esta confianza no se declara, se demuestra. Por eso, Campetrol y Territorio nos invita a conocer a profundidad la geografía, la flora y la fauna de cada zona donde se desarrollan los proyectos.
Solo desde ese conocimiento se puede generar impacto positivo real, tanto en el desarrollo económico como en la conservación biogeográfica de las regiones.
Reputación que se construye con hechos
En ese sentido, la licencia social para operar del sector depende cada vez más de su capacidad para demostrar que son aliados del territorio.
La reputación del sector petrolero, gasífero y energético se fortalece cuando se trabaja de la mano de las comunidades, la academia, los gobiernos locales y nacionales, y los medios de comunicación, mostrando con hechos concretos el compromiso con la preservación.
Para la industria, poner la fauna y los ecosistemas en el centro de la narrativa es una declaración de principios y no algo simbólico.
Es algo que parte de reconocer que el respeto y la apreciación por la naturaleza deben guiar cada decisión operativa de las empresas del sector, cada inversión y cada proyecto que se emprenda. Es entender que la sostenibilidad ambiental no compite con la rentabilidad; sino que realmente la garantiza a largo plazo.
Un capital intangible que trasciende
El capital de confianza que se genera al proteger la biodiversidad es quizás el activo intangible más poderoso de los miembros de la industria.
En un momento en que múltiples actores observan y evalúan el desempeño de la industria, demostrar con acciones concretas que se prioriza la conservación los posiciona como líderes responsables del cambio.
Este compromiso cobra especial relevancia en el contexto político actual. Con elecciones de Congreso y presidencia en el horizonte, la alineación visible y verificable con la conservación de la fauna y los ecosistemas les permite participar constructivamente en las conversaciones sobre el futuro energético del país.
Colombia ha confiado a la industria la responsabilidad de aprovechar sus recursos energéticos, y su respuesta busca estar a la altura de esa confianza: operando con excelencia técnica, sí, pero también con profundo respeto por la vida que los rodea. Porque al final, la verdadera medida del éxito no será solo cuánta energía produce le sector, sino cuánta biodiversidad logran proteger mientras lo hacen.
Una invitación a la acción colectiva
Sobre la iniciativa Campetrol y Territorio, el sector asegura que es más que una campaña, una invitación a que toda la industria asuma su rol como protectora activa de la biodiversidad colombiana.
Para ellos es un llamado a que cada empresa, cada proyecto y cada profesional del sector entienda que trabajar en pro de los ecosistemas no es un costo adicional, sino una inversión en la viabilidad futura.