Así son los parques de servicios tecnológicos, más competitivos por la tecnología
viernes, 20 de marzo de 2020
Las áreas enfocadas en este tipo de servicios son una gran oportunidad para el desarrollo de empresas de base tecnológica
Las Zonas Francas industriales de servicios tecnológicos fueron diseñadas para fomentar el desarrollo de empresas de base tecnológica enfocadas en la exportación y, de manera subsidiaria, hacia el mercado local.
Sobre su funcionamiento Édgar Orlando Martínez, director ejecutivo de la Cámara de Usuarios de Zonas Francas de la Asociación Nacional de Empresarios (Andi) explicó que “deben invertir entre US$2,5 millones y US$22,2 millones y generar 500 y 150 empleos directos respectivamente. Este modelo aplica cuando se trata de Zonas Francas especiales fuera de parque”.
Sin embargo, el directivo agregó que “si la empresa de servicios decide instalarse dentro de un parque de Zona Franca, el modelo cambia en el sentido que se le exige una inversión entre US$1,2 millones y US$2,7 millones y la generación de 30 y 50 empleos respectivamente. Como se ve, existe una clara intención del Gobierno de promocionar para que las empresas se instalen dentro de un parque de este tipo”.
Estos parques de negocio están hiperconectados, cuentan con servicios de energía y conectividad robustos y tienen una infraestructura de talla mundial, que los habilita para ofrecer servicios como la tercerización de procesos administrativos (BPO) y el desarrollo y comercialización de software (ITO), entre otros.
“La infraestructura de las Zonas Francas sumada a la previsibilidad del régimen tributario, las hacen atractivas para empresas que buscan estabilidad y competitividad en el mercado internacional. Hoy Colombia está en posición de duplicar sus exportaciones de servicios apalancado en las ventajas tributarias y no tributarias de las Zonas Francas y en el talento que podamos atraer hacia ellas”, dijo Jaime Miller, CEO de Zonamérica Colombia.
Sobre los beneficios tributarios, Jorge Salamanca, gerente de Zona Franca Metropolitana, dijo que “son fundamentales, porque los ahorros que logran los industriales al renovar sus equipos, teniendo la última tecnología de punta, hace que sean más rentables y puedan acceder en mejores condiciones a nuevos mercados, siendo competitivos. Esos ahorros serían prácticamente imposibles por fuera de una Zona Franca”.
Miller, sin embargo, afirmó que “el principal beneficio de una Zona Franca dedicada exclusivamente a servicios, no tiene que ver con lo tributario, sino con los siguientes factores: primero, la posibilidad de atraer y retener empleados calificados; segundo, la posibilidad de escalar operaciones, en la medida de que las Zonas Francas son áreas de gran extensión; y tercero, los parques industriales de servicios al no tener industria pueden ubicarse en espacios comerciales o residenciales, lo que les permite acceder a graduados de las universidades vecinas y facilita el acceso del personal a las empresas allí instaladas”.
Cambios en la Ley de crecimiento
La Ley de Crecimiento permitió la acumulación del régimen de Zonas Francas con el de Mega Inversiones, lo que supone varias ventajas al momento de fomentar la inversión extranjera directa, como las siguientes: el único impuesto que debe pagar el inversionista es 27% y la repartición de dividendos queda exenta; las nuevas inversiones pueden depreciar sus activos en un periodo mínimo de dos año, sin importar la vida útil del activo; los contribuyentes que hagan estas inversiones no estarán sometidos ni al sistema de renta presuntiva ni al impuesto al patrimonio; cuando la Mega Inversión obtenga el régimen franco, los equipos no causarán arancel e IVA.