Ethereum ya suma 10 años como una de las criptomonedas más grandes del mundo
viernes, 8 de agosto de 2025
El activo digital fue concebido a finales de 2013 por el programador Vitalik Buterin y fue lanzado oficialmente como plataforma en 2015
Martín Pinzón Lemos
Ethereum es una plataforma digital que adopta la tecnología blockchain, o de cadena de bloques, y expande su uso a una gran variedad de aplicaciones. Ether, la criptomoneda nativa, cumple 10 años, mientras es la segunda más grande del mercado, solo detrás de Bitcoin.
Buscando superar las limitaciones de bitcoin, Ethereum fue concebido a finales de 2013 por el programador Vitalik Buterin y fue lanzado oficialmente en 2015. Su visión, plasmada en un libro blanco (white paper), era crear un blockchain más flexible que permitiera no solo transacciones monetarias, sino también la ejecución de “contratos inteligentes” y aplicaciones descentralizadas, dApps.
Para financiar su desarrollo, el proyecto realizó una venta inicial de su criptomoneda nativa, Ether, ETH, durante 2014, y la red fue lanzada oficialmente, el 30 de julio de 2015. La criptomoneda vale hoy en torno a US$3.600, en promedio.
Para el CEO de Tactical Trading, Juan Pablo Vieira, este es un de los tres momentos más importantes de la historia de la divisa. Otros de esos momentos sería “The DAO Hack y bifurcación”, en 2016, que consistió, en palabras de Vieira, en que “un error en un contrato llevó a la pérdida de millones en ETH. La comunidad decidió bifurcar la red para recuperar los fondos, naciendo Ethereum Classic y demostrando la resiliencia y gobernabilidad del proyecto”.
El tercer hito más relevante de la década de historia de Ethereum ocurrió en 2022, cuando “abandonó la minería (Proof of Work) y adoptó un sistema de validación más eficiente y ecológico (Proof of Stake), reduciendo su consumo energético en más de 99%”, según la opinión del analista financiero y CEO.
Guilherme Nazar, vicepresidente regional de Binance para América Latina, se refirió a la relevancia de la moneda en la región. “La red Ethereum, hogar del token Ether - la segunda criptomoneda más grande por capitalización de mercado -, cumple 10 años como un pilar fundamental de la nueva economía digital. Más que una criptomoneda, Ethereum se ha establecido como una infraestructura tecnológica esencial, impulsando la migración de instituciones financieras tradicionales hacia el entorno on-chain. Esta transición trae beneficios concretos en eficiencia, transparencia y descentralización”, destacó Nazar.
Además, el vicepresidente de Binance para la región añadió que “la adopción de ETH en reservas de tesorería corporativa está en crecimiento, con las ETH Treasury Companies siguiendo el modelo de las Bitcoin Treasury Companies. Además, Ethereum lidera la expansión de la tokenización de activos reales, un mercado que ya supera los US$24.000 millones a nivel global. Posicionada en el centro de la interoperabilidad entre el mercado tradicional y el universo cripto, Ethereum está moldeando el futuro del sistema financiero global”.
Vieira afirmó que, 10 años después de su lanzamiento, ETH sigue siendo una criptomoneda rentable por varias razones: “Ethereum tiene fundamentos fuertes: una red robusta, adopción institucional y roadmap claro hacia la escalabilidad; utilidad real: a diferencia de muchas altcoins, ETH tiene usos concretos en DeFi, NFT, staking, entre otros; y potencial de apreciación: con mejoras futuras (como Danksharding y rollups más eficientes), la red será más escalable y competitiva”, dijo el analista.
Perfiles para no invertir en esta cripto
A pesar de su potencial, Ethereum no es un activo recomendable para perfiles de inversión conservadores o con baja tolerancia al riesgo. La alta volatilidad inherente a esta criptomoneda, que puede generar caídas de entre 20% y 50% en el corto plazo, la convierte en una opción inadecuada para capitales que no pueden permitirse tal exposición.
Por esta misma razón, tampoco es aconsejable para inversionistas con horizontes temporales reducidos, ya que las fluctuaciones del mercado pueden impactar negativamente los fondos que se necesiten en meses.