Finanzas

AFP alistan chequera para invertir US$12.700 millones en carreteras

Reuters

Hasta ahora las AFP concentraban sus inversiones principalmente en los mercados de capitales en activos como la deuda pública interna, acciones y en el mercado de bonos de los sectores de gas, hidrocarburos, telecomunicaciones y generación y transmisión de energía.

Pero la nueva ventana de oportunidad en el sector de infraestructura vial se abrió con el flamante esquema de contratación de las concesiones y del financiamiento dentro del programa denominado de Cuarta Generación, que demandará inversiones por unos US$25.000 millones, que abarca 40 proyectos y culminaría en 2020.

"Lo que se ha pensado hasta ahora es invertir en la fase ya operativa en unos bonos de infraestructura cuyos subyacentes van a ser por un lado los peajes de las carreteras y por otro las vigencias futuras que da el Gobierno", dijo a Reuters Santiago Montenegro, presidente de la Asociación Colombiana de Administradores de Fondos de Pensiones y Cesantías (Asofondos).

"También estamos estudiando con el Gobierno la posibilidad de vincularnos desde un comienzo ya sea con unas garantías de que nos comprometemos al 'swap' de la deuda de más corto plazo que viene de los bancos para convertirlas en bonos, o a través de una especie de fondo de capital privado para deuda, involucrándonos desde el comienzo de la fase de construcción", agregó.

El negocio privado de pensiones en Colombia está en manos de Colfondos, propiedad de Scotiabank; Porvenir, del magnate Luis Carlos Sarmiento; Protección, del holding de inversiones GrupoSura, y Skandia de Old Mutual, firmas que administran recursos por casi US$79.000 millones.

Montenegro precisó que el inicio de las inversiones en la construcción de las carreteras será gradual y gran parte se cubrirá con el crecimiento de las rentabilidades de las firmas y la vinculación de nuevos afiliados al sistema, por lo que no será necesario desinvertir en otros activos.

Entre los proyectos previstos dentro del programa de concesiones está la construcción de dobles calzadas, puentes y túneles, en busca de mejorar la competitividad del país, lo que aportaría un crecimiento adicional de 1,5% en el Producto Interno Bruto de la cuarta mayor economía de América Latina a partir de 2015.

Montenegro destacó como modelo de inversión en infraestructura vial el caso chileno, país en el que las AFP han financiado la construcción de autopistas urbanas y nacionales, aeropuertos, edificios públicos e incluso cárceles.

"El caso relevante es Chile, en donde tiene un país con la mejor infraestructura de carreteras de América Latina muy parecida a la de Europa y en donde los fondos de pensiones jugaron un papel clave en su financiación", concluyó.