Alta gerencia, asegurarla es deber de las empresas
martes, 19 de febrero de 2013
José Luis Plana
En los últimos años se ha venido incrementando notablemente la exposición de los administradores y gerentes a los reclamos de terceros como consecuencia de la toma de decisiones yacciones relacionadas con la ejecución de los negocios de las compañías.
Esto se debe al régimen legal que les impone la responsabilidad solidaria e ilimitadaestablecida en la Ley 222 de 1995.
Ante este tipo de situaciones, en Colombia como en otros países,aquellos funcionarios - independientemente del tipo de sociedad de la que sean dueños o empleados - pueden llegar a responder con su patrimonio personaly familiar. Cada vez es más creciente la cantidad de litigios y reclamos contra estos ejecutivos y en épocas de crisis se pueden incrementar y agravar, como hemos visto en hechos ocurridos recientemente en el mercado de valores de nuestro país. Estos procesos producen enormes gastos legales y de asesoría e incluso, pueden derivar en una cuantiosa condena.
Los altos directivos están llamados a responder requerimientos legales y administrativos de los entes reguladores de control y vigilancia, de sus clientes, competidores, proveedores, empleados y de igual forma responder a los accionistas. Incluso en entidades con capital estatal se involucra la responsabilidad fiscal, teniendo la obligación de responder ante organismos como la Procuraduría y la Contraloría.
Para suplir estas necesidades, el mercado asegurador ha puesto a disposición de las compañías novedosas herramientas para proteger el patrimonio personal de los directores y administradores ante eventuales reclamaciones que generen gastos legales o posibles condenas en su contra, derivadas de asuntos laborales, impositivos, comerciales, de competencia, entre otros, a los que pueden verse expuestos.
Este tipo de pólizas permite que dichos funcionarios lleven a cabo su trabajo y se desempeñen en las organizaciones con la tranquilidad necesaria para poder tomar decisiones acertadas que permitan cumplir las metas y los objetivos de manera correcta y clara, dentro del marco de la ley.
La cultura aseguradora ha ido creciendo de manera importante en Colombia, cada vez con más fuerza, tanto en el ámbito personal como en el corporativo.
No obstante, es deber de las compañías colombianas no solamente asegurar propiedades, inversiones, dinero y demás bienes sino también su capital humano y sobre todo, el grupo de administradores que se ven obligados a tomar decisiones de alto riesgo.
Por lo expuesto, es importante estar cubiertos con este tipo de seguros que beneficia a las compañías, brindándoles a sus altos directivos las garantías para asumir cargos importantes y desempeñarse de la mejor manera.