Bancolombia y Davivienda, entre las entidades financieras que ofrecen tarjetas prepago
jueves, 28 de noviembre de 2024
Dentro de las actividades que permiten realizar estos plásticos está el pago de nómina y viáticos de empleados, así como pagos de canasta básica
Las tarjetas de crédito prepago o recargables son un tipo de plástico que funciona de manera similar a una tarjeta de débito o crédito, pero con una característica clave, y es que el dinero debe cargarse en la tarjeta por adelantado antes de poder usarla.
Según Bbva, es una alternativa útil para gestionar el gasto y evitar el endeudamiento. Estas tarjetas no están vinculadas directamente a una cuenta bancaria, y su disponibilidad depende del saldo que el usuario haya cargado previamente.
Una de las principales ventajas de las tarjetas prepago, según Juan Camilo Quintana, analista financiero, es el control financiero que ofrecen. “Al limitar el gasto al monto recargado, resultan ideales para quienes desean establecer presupuestos claros”.
En este contexto, son muy utilizadas también por las empresas. Estas recargan un monto específico en las tarjetas, el cual será utilizado por los empleados para cubrir gastos previamente autorizados, como viáticos, suministros, transporte o compras menores. Cada tarjeta tiene un límite de gasto igual al saldo cargado.
Jugadores del mercado
El mercado de tarjetas prepago ofrece una amplia variedad de opciones diseñadas para satisfacer diferentes necesidades, tanto empresariales como personales. Algunos de los competidores son Davivienda, Banco de Occidente, Banco Pincha, Bancolombia, entre otros.
Davivienda, por ejemplo, cuenta con tres tipos de tarjetas recargables orientadas a pagos de nómina, gasolina y alimentación. Estas tarjetas están dirigidas a empresas que buscan optimizar la administración de los pagos a sus empleados, proporcionando una alternativa práctica y eficiente.
Por su parte, MasterCard ofrece una tarjeta prepagada que simplifica el seguimiento de los gastos empresariales, permitiendo un control más detallado del flujo de caja. Este producto está diseñado especialmente para organizaciones que desean mejorar su gestión financiera.
El Banco de Occidente dispone de una tarjeta Visa Prepago que facilita los pagos de nómina y viáticos, sin que los empleados requieran una cuenta bancaria. Adicionalmente, esta tarjeta es útil para la gestión de los gastos de caja menor, brindando una solución ágil y segura para las empresas.
Por su parte, el Banco Pichincha cuenta su tarjeta prepago recargable Visa, ideal para personas naturales.
Ahora bien, si se pregunta si su tarjeta Nequi, RappiCard y DaviPlata entra en esta categoría, Quintana afirmó que, aunque estas tarjetas tienen funciones similares en cuestión de permitir un control eficiente del gasto sin necesidad de líneas de crédito, se diferencian porque traen funciones adicionales como transferencias y retiros en efectivo.
Proyecciones de mercado
Según datos tomados por Bbva de The Brainy Insights, el mercado mundial de tarjetas prepago se valoró en US$1,11 millones en 2022 y creció a una tasa anual compuesta de 16,21% entre 2023, con proyección a 2032. La creciente demanda de tarjetas prepago se puede atribuir al crecimiento de la industria del comercio electrónico y minorista, dado que permiten al consumidor realizar transacciones sin efectivo.
Billeteras digitales, otra alternativa para controlar el gasto y las finanzas
Las billeteras digitales funcionan de manera similar a as tarjetas prepago, ya que muchas de ellas permiten un sistema de recarga que facilita su uso. Por ejemplo, plataformas como Nequi y Movii ofrecen tarjetas únicas recargables que no generan costos de manejo ni comisiones por transacciones.
También, bancos como Bancolombia, Davivienda y Grupo Aval han lanzado sus propias billeteras digitales, ofreciendo mayor accesibilidad para pagos y transferencias. Otras opciones incluyen Google Wallet, Ualá y Banco W.