Lea todo el discurso con el que Luis Carlos Sarmiento Angulo se retiró del Grupo Aval
jueves, 21 de marzo de 2024
Con el anuncio, Sarmiento Angulo saldrá del Grupo del que es fundador, una empresa que hoy es el mayor conglomerado financiero de Colombia
El banquero más importante de Colombia, Luis Carlos Sarmiento Angulo, anunció su retiro del Grupo Aval durante la asamblea de accionistas que se realizó en Bogotá este miércoles
Con el anuncio, Sarmiento Angulo saldrá del Grupo del que es fundador, una empresa que hoy es el mayor conglomerado financiero de Colombia. Empezó hace 68 años cuando él mismo tomó en arrendamiento una oficina de 18 metros cuadrados en el centro de Bogotá.
Este es el discurso que entregó ante la Asamblea de Accionistas:
"Señoras y señores accionistas,
En esta asamblea voy a anunciar algunas decisiones personales que he tomado, porque seguramente ellas afectarán en alguna forma las resoluciones que se adopten en el curso de las deliberaciones. Por esta razón, solicité al señor secretario incluir en el orden de día este espacio para informarlas a los asistentes.
Me refiero al Grupo Aval, cuya historia se mezcla con la mía propia y se remonta al año de 1956, es decir, hace 68 años. En aquella ocasión tomé en arrendamiento una oficina de 18 metros cuadrados, en el Edificio Henry Faux de la avenida Jiménez con la carrera séptima.
Éramos entonces tres empleados, un contador, un mensajero y el gerente, que por supuesto era yo mismo, que había recibido mi grado de ingeniero con honores en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional dos años antes, en 1954.
En ese momento nace la Absa que pocos años después da lugar a la creación del Grupo Aval. Desde entonces, muchísima agua ha corrido bajo los puentes, he trabajado sin faltar nunca, en forma continua e infatigable, para que nuestro Grupo haya llegado a ser lo que es hoy, uno de los más importantes conglomerados financieros e industriales del país que da trabajo permanente a cerca de 120.000 personas.
Poseemos participaciones controlantes en Grupo Aval y a través de éste en los bancos de Bogotá, Occidente, Popular y Av Villas, la Corporación Financiera Colombiana y la Administradora de Fondos y Cesantías Porvenir.
También, son parte de nuestra organización la Compañía de Seguros Alfa y las inversiones en otros sectores, la propiedad en el El Tiempo, en los medios de comunicación, y Construcciones Planificadas, en el sector de la construcción.
En todos estos años, con el trabajo concienzudo de los miles de colaboradores ya mencionados, hemos logrado conseguir resultados realmente excepcionales. En el sector bancario, un aspecto que siempre resaltamos en estas asambleas, hemos conseguido ser uno de los grupos de bancos más importantes de Colombia, alcanzando actualmente participaciones de mercado agregadas de 25% en carteras y otro tanto en depósitos.
La AFP Porvenir es la líder indiscutida en los fondos de pensiones, con participaciones de 50% en pensiones obligatorias y de 45% en cesantías. Corficolombiana es una empresa muy calificada que invierte en algunos de los sectores más destacados de la economía, tales como energía, gas e infraestructura. En nuestras empresas, hemos construido cientos de kilómetros de carreteras de las más exigentes especificaciones y más de 40.000 viviendas, a la vez que tenemos importantes inversiones en los sectores agrícolas e industriales de Colombia.
Finalmente somos, por supuesto, muy importantes contribuyentes a los impuestos que cobra el país para el sostenimiento del aparato gubernamental. También quiero resaltar el rol del Grupo Aval que, además de ser el gestor de las inversiones en el sector financiero del país, es un actor muy destacado y con gran reconocimiento en el mercado público colombiano e internacional.
En 1999, sus acciones fueron las primeras en ser ofrecidas por oferta pública de democratización en el mercado de valores colombiano, oferta en la que algunos, espero que muchos de ustedes, hayan adquirido sus títulos y la compañía ha hecho varias emisiones posteriores tanto de acciones como de títulos de renta fija nacional e internacionalmente. Además, es una de las poquísimas empresas colombianas que tiene un registro pleno en la Bolsa de Nueva York en la que ha hecho emisiones de acciones por encima de US$1 millón.
El permanente esfuerzo por lograr los mejores resultados no nos ha impedido ser solidarios para ejecutar importantes proyectos enfocados en la educación y en la salud, así como apoyar a las múltiples víctimas de todo orden que traen las tragedias que suelen presentarse de tiempo en tiempo en el desarrollo de los acontecimientos.
Por citar sólo algunos ejemplos de estas contribuciones, le puedo referir a los 400 apartamentos que construimos para ser donados gratuitamente a los perjudicados que perdieron sus casas en las graves inundaciones que se presentaron en Bogotá en el año 2011 y las 50 casas que entregamos a los damnificados por las inundaciones de Cartagena en el año 2004.
También construimos, y donamos sin pago alguno, el edificio para la biblioteca de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional con un área de cerca de 9.000 metros cuadrados. Hemos sido donantes habituales de equipos médicos para varios hospitales de Bogotá. Luego en la epidemia del covid, contribuimos tanto con diversos equipos médicos como con alimentos que requería la población más necesitada y finalmente construimos el Ctic, íntegramente con nuestros recursos.
El Ctic es un hospital especializado para el tratamiento del cáncer de las más modernas especificaciones y con lo último en tecnología para el tratamiento de los enfermos. Se trata de una construcción de 100.000 metros cuadrados en la cual invertimos cerca de US$400 millones. El Ctic pertenece a una fundación sin ánimo de lucro, totalmente constituida y administrada por nuestro grupo financiero, que ha aportado el 100% de los recursos necesarios para su constitución y mantenimiento.
En esta larga carrera hemos enfrentado y superado crisis de inmensas dimensiones, entre otras quisiera mencionar la relacionada con el sector hipotecario entre el 99 y el 2001 que llevó a la desaparición del Upac.
Luego aquella relacionada con la gran crisis global y el colapso del mercado bursátil internacional entre 2007 y 2008. También cuando algunos sin conocer la larguísima historia de nuestros valores y principios cuestionaron nuestra integridad por haber sido socios minoritarios en el desarrollo de un proyecto vial en el que el accionista mayoritario era Odebrecht, una firma brasilera de gran prestigio internacional en aquella época, pero que al final resultó ser de delincuentes internacionales hoy confesos, que por sí mismos y sin nuestro conocimiento ni consentimiento realizó una serie de hechos delictivos conocidos por la opinión pública.
Finalmente, la que se derivó de la pandemia del covid-19 que se inició en 2020 y cuyos efectos todavía se sienten en alguna medida. Aunque en las crisis hemos tenido que redoblar esfuerzos, y apoyar las instituciones de nuestro grupo que lo han requerido, siempre hemos salido fortalecidos de las mismas.
En todas estas vicisitudes he estado al frente y ejerciendo el control, sin embargo como siempre en la vida llega un momento en que es necesario un cambio motivado por la fatiga, el deseo de descanso y/o de un cambio personal, así como por la necesidad de una renovación para darle cabida en el Grupo a las nuevas generaciones con nuevas ideas y más juventud que estén más acompasadas con el paso del tiempo.
En consecuencia, y luego de una profunda reflexión, he tomado la decisión de retirarme del cargo de presidente de la junta directiva del Grupo Aval, posición que he ocupado desde su fundación hace 30 años y desde la cual he tenido por todo este tiempo una visión completa, permanente y oportuna de todas nuestras empresas lo que me ha permitido dirigir activamente su desempeño.
Deseo que esta decisión sea efectiva a partir de esta fecha, pues esta asamblea elegirá hoy una nueva junta directiva a la cual ya no perteneceré. Por lo anterior, y de acuerdo a nuestros planes de sucesión diseñados con profundo análisis y en extensas conversaciones, solicito a la asamblea general de accionistas que incluya dentro de los miembros de la junta directiva del Grupo Aval a mi hijo el doctor Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez, con quien hemos trabajado hombro a hombro en estas tres décadas.
También, sugiero a la junta directiva en la primera sesión que se celebre después de esta asamblea considere el nombramiento del doctor Sarmiento Gutiérrez como presidente de la misma con el objeto que pueda continuar orientando los magníficos resultados que hemos conseguido en estos largos años de trabajo manteniendo y haciendo honor a los principios éticos y morales que siempre nos han regido.
Como bien saben ustedes, el doctor Sarmiento Gutiérrez ha sido presidente del Grupo Aval desde el año 2000 y ha sido fundamental para la obtención de los logros que hemos conseguido y que han hecho de esta institución uno de los mayores referentes en el sector financiero colombiano.
También, en mi condición de accionista mayoritario sugiero a la nueva junta que, para reemplazar al doctor Sarmiento Gutiérrez como presidente del Grupo Aval, considere el nombre de la doctora María Lorena Gutiérrez Botero quien se vinculó a nuestro grupo empresarial desde agosto de 2018 como presidente de Corficolombiana.
En sus casi seis años con nosotros, ella ha manejado con gran éxito la Corporación Financiera Colombiana participando en el crecimiento del patrimonio de la misma de $3,4 billones en junio del 18 a $11,9 billones en diciembre de 2023.
La doctora Gutiérrez es ingeniera industrial de la Universidad de los Andes y tiene un máster y un doctorado en finanzas de la Universidad de Tulane de Estados Unidos. Antes de vincularse con nuestro grupo en la primera fase de su carrera estuvo muy ligada al sector académico, donde fue entre otras decana de la facultad de administración en su alma mater. Posteriormente, estuvo durante ocho años en algunas de las posiciones más destacadas del sector público donde fue alta consejera, ministra de la Presidencia, ministra de Comercio, Industrial y Turismo y embajadora de Colombia en Alemania.
Estoy seguro de que las personas que me sucederán, mi hijo, y en general mi familia, así como el muy destacado y capaz de un grupo de ejecutivos y colaboradores de Grupo Aval, y sus subordinadas, seguirán consiguiendo para todos nosotros los accionistas los mejores resultados posibles.
No sobra comentar que desde mis cuarteles de invierno y en condición de mayor accionista del grupo seguiré todos los días pendientes del desarrollo y crecimiento de esta organización, atento al desempeño de todas sus labores para seguir cosechando el éxito y vigilando siempre que las normas éticas sobre las cuales descansa nuestra solidez se mantengan y se practiquen consistentemente.
Espero que mi guía y consejo sea útil y contribuya al mejor desarrollo de nuestras instituciones, particularmente en un momento como está experimentando Colombia en la actualidad.
Quiero expresar mi profundo agradecimiento personal a todos los miembros de mi familia, en particular a mi hijo Luis Carlos, así como nuestros colaboradores directivos que han contribuido a la obtención de los logros de las empresas que hacen parte de nuestro grupo, y muy particularmente a ustedes, queridos accionistas, por su apoyo permanente en esta cruzada de construir empresa en Colombia.
Muchas gracias."