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Uso de las oficinas de bancos ha ido cayendo de forma progresiva desde 2018 a 2022

Los bancos pasaron de tener 12.699 oficinas en 2018 a 11.257 en 2022, es decir, el año pasado había 11,36% menos que hace cinco años

Karen Valentina Mora Aguilar

Las oficinas bancarias son una de las alternativas que tienen las personas para poder solucionar sus inconvenientes con algunos de sus productos financieros, para pagar recibos o para hacer consignaciones, sin embargo, en los últimos años suele ser noticia que algunas de ellas han sido cerradas.

Y es que justamente, en los últimos cinco años, según la recopilación de los informes de operaciones financieras de la Superintendencia Financiera de Colombia, han pasado de haber 6.338 oficinas en 2018 a 5.616 en 2022, es decir, el año pasado había 11,39% menos oficinas que hace cinco años.

Esto, puede deberse la intención de los bancos por focalizar sus esfuerzos en el ámbito digital, tal como lo aseguró Banco Pichincha en su momento, cuando anunció el cierre de 47% de sus oficinas. "Los bancos grandes del país han cerrado durante los últimos tres años más de 15% de sus sucursales. No solo tiene que ver con la idea de que los clientes van migrando, sino también al uso de la infraestructura física", explicó Germán Rodríguez, presidente de la entidad.

Si nos centramos puntualmente en el número de operaciones en oficinas, aunque también habían tenido una caída progresiva, mostraron un repunte notorio en 2022, año en que hubo 455.322.606, de las cuales 428.607.279 fueron monetarias, por un monto total movilizado de $2.678,5 billones.

Aunque fueron 105.000 menos que en 2018, representaron un aumento de 14,31% frente a 2021, año en el que se realizaron 390.183.541 operaciones, de las cuales 361.501.680 fueron monetarias por un monto total de $2.277,5 billones.

Cabe destacar que en 2018 se hicieron un total de 550.542.211 operaciones, de las que 507.130.551 fueron monetarias, movilizando un monto de $2.690,6 billones.

Esto permite entender que, pese a que se han ido cerrando ciertas oficinas, y aunque no tienen el mismo uso que antes, las personas siguen recurriendo a ellas para solucionar sus situaciones financieras y así tener una atención más directa y personal.

Resta ver si más bancos se seguirán uniendo a la tendencia del cierre de oficinas para fortalecer sus canales digitales, entendiendo que al parecer estas están dejando de ser rentable para ellos.

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