Eliminación de costos financieros impactaría 0,6% del Producto Interno Bruto
miércoles, 29 de mayo de 2019
Proyecto de ley que suprime las cuotas de manejo llevaría a que todos los créditos se encarezcan 80 puntos básicos y el impacto en el recaudo sería de $1 billón, según Asobancaria
Heidy Monterrosa Blanco
Actualmente hay en curso en el Congreso de la República varios proyectos de ley que modificarían la manera como opera el sistema financiero en el país, como la eliminación de cobros y la modificación al Habeas Data. Santiago Castro, presidente de Asobancaria, se refirió al impacto que tendrían estas modificaciones en la economía y en el acceso a servicios financieros.
¿Cuál es la posición del gremio respecto al proyecto de ley que busca eliminar algunos de los costos financieros asociados a cuentas de ahorro y tarjetas de crédito? ¿Cuál es su impacto?
Nos parece muy grave establecer un control de precios. Si este proyecto saliera adelante, obviamente se va a encarecer el crédito para casi todas las personas naturales y jurídicas, especialmente en la base de la pirámide hacia los consumidores más vulnerables. No van a tener la posibilidad de acceder al crédito o de tener las garantías que se les van a pedir, porque no van a ser bancarizables. Su estructura de costos no les da sin una cuota de manejo, es el caso de las microfinancieras y las compañías de financiamiento comercial. Estamos dándole un golpe certero, no al sistema económico, sino a la posibilidad de que las personas puedan tener unos créditos y acceder a los bancos que más se adecúen a sus necesidades. Hay ya cinco entidades que ofrecen productos cero costo. Mi pregunta es, ¿por qué queremos regular algo que el mercado ya logró por la competencia? Este proyecto podría poner en entredicho buena parte de la inversión extranjera en el sector, porque hay preocupación por la presencia o, al menos, por el tamaño de la operación de algunos bancos extranjeros.
¿En qué porcentaje se encarecería el crédito?
Podría ser de 0,8%, o sea 80 puntos básicos para toda la gama de créditos. Además, hay un impacto en el crecimiento económico, que hemos calculado en 0,6%. O sea que las previsiones de 3,6% del Gobierno se bajarían a 3% y las nuestras bajarían de 3,2% a 2,6%. El recaudo se impactaría en cerca de $1 billón.
También está en curso el proyecto de ley que modifica la Ley de Habeas Data, ¿cuáles son los pros y contras de esta propuesta?
En este proyecto se está es afectando el reporte positivo de millones y millones de colombianos, que conforman 92% de todos los reportes que están en esas centrales de riesgo. Nos estamos olvidado que no podemos hacer borrón y cuenta nueva sobre 8% sin contaminar o dejar sospechosos los registros de ese 92%. Experiencias anteriores nos han indicado que fuera de que solo un porcentaje tiende a acogerse a estas iniciativas para poder pagar, 60% se vuelven reincidentes. Ni siquiera le vamos a ayudar a ese 8%, sino que va a ser casi que un 1,6%, pero sí vamos a afectar al grueso de los consumidores financieros que han construido durante años una reputación.
El gremio demandó la sobretasa de renta al sector que introdujo la Ley de Financiamiento. ¿Cómo va este proceso? y ¿qué efecto tiene la sobretasa en el desempeño del sector?
Como es una sobretasa de renta, no se verá reflejada sino hasta que se presenten las declarariones de renta del año 2020 sobre la renta de 2019. La demanda está muy bien argumentada, no solo por nosotros, sino por otros gremios del sector financiero. El Ministerio de Hacienda hizo parte de esta demanda y dijo de manera categórica que ni explícita, ni implícitamente, había dado aval a esta iniciativa durante su discusión en el Congreso.
¿Es un ‘mico’ que se le pasó a la Ley de Financiamiento?
Sí, yo creo que es un mico porque tuvo errores de procedimiento, porque hubo problemas en la consecutividad y, además, porque adolece de legalidad y de fundamento constitucional.
¿Cuál sería el impacto de esta sobretasa en el sector?
El impacto de la sobretasa puede estar entre $700.000 millones y 800.000 millones. El impacto de los costos financieros no es tan fácil calcularlo. Si se analiza y se suma podrían darnos cifras que sobrepasan los $3 billones, de los cuales $1 billón sería un menor recaudo fiscal.
Según el más reciente informe del sector financiero, todas las carteras están creciendo. ¿Cuáles jalonan la economía?
A marzo, el gran jalonador ha sido el crédito de vivienda. Ha tenido un crecimiento de 8% y esperamos un crecimiento a lo largo del año de 7,5%, y la cartera de consumo que ha tenido también un crecimiento bastante interesante. La cartera comercial está en terreno positivo. No está creciendo mucho, pero tenemos que ver que hace unos meses estábamos en terreno negativo. Esperamos que el crédito de consumo crezca 6%; el microcrédito, a 3,9%, y la cartera comercial, que tiene un crecimiento bastante lento, esperamos que se acelere para llegar a 2,9%. Esperamos tener a lo largo del año un crecimiento cercano a 4% de la cartera total.
La gran mayoría de las entidades bancarias están dando pasos hacia la transformación digital, pero la seguridad es un tema que sigue preocupando a los usuarios. ¿Cómo se pueden mitigar los riesgos?
En seguridad en transacciones digitales tenemos en Colombia una calificación suficientemente aceptable, incluso por encima de muchos de nuestros pares de la región. Solamente $3,2 de cada $100.000 transados pueden ser objetos de fraude y no porque se perdieron, sino que pueden haber sido un intento de ser hackeados.
¿El Gobierno debería insistir en el proyecto de eliminación de los tres ceros?
No. Ese nunca fue un proyecto conveniente. De pronto hace 20 años, cuando el peso estaba cerca de 1.000 y teníamos tasas de inflación muy altas, pero en este momento yo creo que no tiene ningún sentido, porque tiene unos costos de implementación muy altos que el país no ha alcanzado a medir; nos quiebra todas las tablas de análisis históricos y no ganamos nada.
El perfil
Santiago Castro Gómez es economista y politólogo de la Universidad Católica de los Estados Unidos y tiene una maestría en Administración Pública de la Universidad de Harvard. Trabajó en la Cámara de Comercio y Fundaprogreso, y fue elegido Concejal de Cali y Diputado a la Asamblea del Valle. Fue representante a la Cámara por 10 años, donde hizo parte y presidió la Comisión Tercera de Asuntos Económicos. Participó en el debate y desarrollo de reformas tributarias, reformas financieras y temas presupuestales. Además, fue director general de la Aeronáutica Civil y actualmente es presidente de Asobancaria.